Tras el reciente Consejo de Ministros, el Gobierno ha dispuesto 168,8 millones para el mantenimiento de diversos vehículos de combate. Por un lado, para la gestión del apoyo al ciclo de vida de los submarinos clase S-80 de la Armada. Este modelo participó recientemente en las pruebas de aceptación en fábrica del sistema AIP BEST (Bio-Ethanol Stealth Technology) de Navantia. La solución permitirá a los buques permanecer en inmersión durante tres semanas, de acuerdo con el constructor naval español.
En ese sentido, la referencia publicada por Moncloa acota que el Acuerdo Marco resulta "necesario" al no preverse la disposición a corto plazo, por parte de la Armada, de los medios estructurales, de instalaciones, materiales ni personales cualitativos o cuantitativos suficientes para atender la ejecución propia de los trabajos de gestión del sostenimiento de los nuevos modelos, por lo que resulta "determinante" atenderlas mediante el auxilio de la industria. Son 36 millones estimados con una duración de dos años desde la firma del contrato, con la posibilidad de prorrogarlo por el mismo periodo.
Inmersión del submarino S-80. Firma: Navantia
132,8 millones para mantenimiento y respuestos de helicópteros
En tanto, se han destinado 132,8 millones por la prestación del servicio de mantenimiento y adquisición de repuestos para los helicópteros del Ejército de Tierra. Un gasto, tanto preventivo como correctivo, que se justifica para "alcanzar la disponibilidad, operatividad fijada y mantener la seguridad de las dotaciones, así como la seguridad física del personal que conforma las unidades".