La compañía Navantia ha dado este miércoles el pistoletazo de salida al programa F-110 en su astillero de Ferrol con la ceremonia de corte de chapa de la primera de las cinco nuevas fragatas que construirá en estas instalaciones para la Armada española.
Al acto asistieron el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la presidenta de la SEPI, Belén Gualda, y el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, entre otras autoridades.
El presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, destacó que el astillero ferrolano trabajará en “una fragata moderna y de última generación” que estará acompañada “de un gemelo digital para el sostenimiento predictivo del buque”. Tras su intervención, se procedió al corte por plasma bajo el agua de la primera plancha de acero de la F-111. El próximo hito de este buque será aproximadamente dentro de un año y medio con la puesta en la grada del primer bloque.
Referente en fragatas
Por su parte, el presidente del Gobierno destacó en su intervención que el programa F-110 es un proyecto que dará un impulso a la actividad del astillero de Ferrol y su industria auxiliar, y convertirá a Navantia en “una referencia internacional en materia de fragatas”.
Esta fragata, añadió Sánchez, será un buque moderno con “un elevado grado” de fabricación española y europea que permite avanzar en el proceso de reindustrialización de España y también en la autonomía estratégica de Europa. El programa, subrayó, garantizará carga de trabajo para la próxima década y será una de las piezas de la “sostenibilidad y rentabilidad” de Navantia.
El programa implica una inversión directa de 4.300 millones de euros, la participación de 500 empresas españolas y la creación de unos 9.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, durante la próxima década. También supone una fuerte inversión de 100 millones de euros en la fábrica digital de bloques que permitirá mejorar la competitividad y la rentabilidad a partir de la segunda fragata, de acuerdo con los planes de Navantia.
De acuerdo con el calendario actual, el próximo mes de junio finalizará la Revisión Crítica de Diseño (CDR) del buque. El primero de los cinco de la serie entrará en servicio en 2027 en la Armada española.
Buque de última generación
El programa de fragatas F-110 es considerado por Navantia como la piedra angular de la digitalización del astillero de Ferrol, en un momento en que la empresa está inmersa en un plan de transformación digital 4.0. Los buques serán pioneros al contar en su diseño con un gemelo digital del buque, que permitirá operarlos con los estándares tecnológicos más avanzados del momento. La entrega de la primera de las cinco fragatas está prevista en febrero de 2027 y la última en agosto de 2031.
La F-110 será un buque escolta polivalente, con una elevada capacidad antisubmarina y un espacio multimisión. Estará diseñada para escenarios de alta intensidad, proporcionando la respuesta al entorno cambiante del siglo XXI y un impulso fundamental para la industria nacional de defensa.
La Armada recibirá cinco fragatas que llevarán el nombre de marinos ilustres de la historia de España: Ramón de Bonifaz (F-111), Roger de Lauria (F-112), Menéndez de Avilés (F-113), Luis de Córdova (F-114) y Antonio Barceló (F-115). Los nuevos buques vienen a sustituir a las seis veteranas fragatas de la serie F-80 (Santa María, Victoria, Numancia, Reina Sofía, Navarra y Canarias), al final ya de su vida, después de tres décadas en servicio.