Aguad renueva la cúpula del Ministerio de Defensa argentino

La renuncia de Julio Martínez como titular del Ministerio de Defensa de Argentina para presentarse a las próximas elecciones legislativas ha provocado una vorágine en la cartera que dirigió durante un año y medio, desde la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia del país. Ahora, con el flamante ministro Oscar Aguad al frente, los cambios en el Gabinete no han tardado en llegar.

El pasado 21 de julio, apenas cuatro días después de que Aguad fuera puesto oficialmente a cargo de la cartera, el Boletín Oficial hizo públicas las renuncias de tres de las autoridades más relevantes de la cúpula ministerial: el secretario de Estrategia y Asuntos Militares, Ángel Tello; el secretario de Servicios Logísticos para la Defensa y Coordinación Militar en Emergencias, Water Ceballos; y el jefe del Gabinete de Asesores de Aguad, Damián Vaudagna. Este último no salió del Ministerio, sino que fue relegado a la subsecretaría del área que dirigía Ceballos y que, tras los cambios, quedó a cargo de Graciela Susana Villata, quien se convirtió así en la única mujer en dirigir una secretaría en la cartera desde la victoria del frente conservador Cambiemos. Asimismo, se designó a Raúl Ripa como nuevo jefe de Gabinete y a Aldo Chighizola como sustituto de Tello.

Macrismo o radicalismo

Según revelaron fuentes castrenses a Infodefensa, en estos momentos, los trabajadores de la cartera se encuentran expectantes, pendientes de que puedan producirse otros movimientos -eso sí, menos relevantes-, ya que parece que Aguad cuenta con una autonomía para elegir su propio equipo que, por el contrario, no le fue otorgada a Martínez. El recién nombrado ministro y su Gabinete forman parte de la rama más “macrista” del Gobierno, en contraposición con Ceballos o Tello, ambos pertenecientes a la centenaria Unión Civica Radical (UCR), que integra la coalición gobernante. El vínculo entre el presidente y Aguad es evidente desde el inicio del mandato, ya que antes de quedarse a cargo de los asuntos castrenses, este último estaba a cargo de Comunicaciones, una cartera creada expresamente por Macri tras su llegada al poder y que ha desaparecido ahora al ser absorbida por la de Modernización tras el traspaso.

La gestión de Walter Ceballos

Uno de los cambios más polémicos ha sido el de Ceballos, quien tras hacerse pública su marcha aclaró que no fue apartado, sino que dejó el puesto por decisión propia en base a su “convicción ética” de que corresponde dejar que el nuevo funcionario arme su cartera “con plena libertad”. “Estoy comprometido políticamente con este Gobierno, porque considero que es la herramienta de gestión para erradicar el populismo, el feudalismo y la corrupción que ha caracterizado a varios Gobiernos Nacionales desde 1945 hasta nuestro días y nos han llevado a un estado de degradación social, institucional, económica y moral”, aseveró en su cuenta oficial de Facebook.

Ceballos quiso destacar logros de su gestión como la coordinación de las Fuerzas Armadas en asistencia en emergencias como las devastadoras inundaciones e incendios ocurridos en los primeros meses del año, que el rompehielos ARA Almirante Irízar (Q-5) volviera a navegar tras permanecer diez años inactivo por un devastador incendio y, sobre todo, la articulación de la campaña antártica de verano, la primera que, tal y como contó en una entrevista con Infodefensa, fue realizada íntegramente con medios propios de Argentina.

Los retos

Tal y como publicó Infodefensa, el nuevo equipo tiene ahora el reto de continuar las reformas puestas en marcha por su antecesor y de afrontar proyectos como la adquisición de cuatro aeronaves de entrenamiento avanzado y ataque ligero Beechcraft T-6C+ Texan II a Estados Unidos por 90 millones de dólares o la concreción de la compra de cuatro patrulleros oceánicos L'Adroit OPV 90 a Francia por 300 millones de euros y la de seis aviones Super Étendard al mismo país europeo. Además, a nivel interno, deberá posibilitar la producción de tres IA-63 Pampa III este año, tal y como tiene previsto la Fábrica Argentina de Aviones Brigadier San Martín SA (FAdeA), que ya realizó las pruebas de combustible del primero de ellos.