(Infodefensa.com)
El viceministro para Armamento y Adquisiciones del Ministerio de Defensa checo, Lubor Koudelka, ha convocado oficialmente a los fabricantes GDELS-Santa Bárbara Sistemas, BAE Systems y Rheinmetall a la licitación abierta para el suministro de 210 blindados. Las tres compañías deberán ahora presentar sus ofertas finales para dotar al Ejército checo de estos vehículos orugas de combate de infantería (BVP), entre otras variantes. Koudelka ha entregado la invitación a las tres empresas en disputa esta semana, durante la intensa campaña de pruebas a la que se está sometiendo a los vehículos de los tres candidatos: el Ascod de SBS (versión internacional del Pizarro español); el CV90 de BAE Systems y el Lynx KF41 de Rheinmetall. Un cuarto competidor, el consorcio alemán PSM, tuvo que retirar su modelo Puma por no cumplir con los requisitos establecidos. El contrato en juego asciende a 52.000 millones de coronas (algo más de 2.000 millones de euros al cambio actual).
Las empresas tienen hasta principios de julio para presentar sus ofertas finales, aunque, si lo solicitan, el plazo puede extenderse algo más. Posteriormente los responsables del programa tendrán en torno a un mes para evaluar las ofertas. Para ello se ha ponderado una serie de criterios, entre los que destaca el precio de compra y los costes del ciclo de vida, que tienen un peso del 55 en la decisión final. Además se incluyen varios miles de parámetros técnicos, evaluados a partir de un modelo matemático establecido, y que en conjunto suponen un 30 de relevancia en la decisión final. El 15 restante de la baremación se determina por el grado de participación de la industria local en la oferta.
Durante la campaña de ejercicio a la que están siendo sometidos los tres vehículos en competición se verifican una treintena de requisitos relacionados con la protección balística de los candidatos, su resistencia contra minas y la movilidad, entre otros.
De acuerdo con la publicación local Ceske Noviny, las pruebas, que concluyen el 6 de junio, incluyen ensayos de velocidad sobre distintas superficies, verificaciones de compatibilidad con sistemas ya en uso en el Ejército checo, el movimiento de heridos en el campo de batalla y el sistema de almacenamiento de municiones, entre otros.
En palabras del director del programa de adquisición, Ctirad Gazda, tras lo comprobado hasta el momento, las tres plataformas superan los requisitos militares, por lo que cualquiera que sea el ganador el país dará un salto adelante en comparación con la tecnología ahora en uso. Los nuevos blindados sustituirán en el arsenal checo a sus antiguas flotas de BVP-1 y BVP-2.
Elecciones en otoño
El país celebra elecciones parlamentarias el próximo otoño, por lo que el objetivo que se ha marcado el Ministerio de Defensa es elegir al ganador antes de ese momento, algo que los críticos ven muy difícil. Inicialmente, el nombre del modelo elegido debía conocerse en 2019, pero acabó posponiéndose y la pandemia ha extendido aún más el retraso. De este modo, la fecha de entrega prevista de los vehículos se contempla ahora que se alargue hasta 2027, y también se estima una proyección de la financiación de siete años, hasta 2028.
Durante las pruebas de estos días en Chequia, junto al viceministro Koudelka se encontraban por parte de GDELS, su vicepresidente de Cadenas y director general ejecutivo de GDELS-Santa Bárbara Sistemas, Juan Escriña, y el vicepresidente de Desarrollo de Negocio Internacional de General Dynamics European Land Systems, Thomas Kauffmann.
Interés en Eslovaquia
La vecina Eslovaquia también planea la compra de nuevos blindados, para lo que igualmente estudia la compra del Ascod. A mediados de abril, GDELS-SBS presentó las capacidades de este modelo a representantes del Ministerio de Defensa eslovoco en una exigente demostración en este país. Al igual que República Checa, Eslovaquia también prevé reemplazar a corto plazo sus plataformas de orugas BVP-1 y BVP-2.
El modelo Ascod es la versión de exportación de los blindados de cadenas Pizarro, en servicio en el Ejército español, y Ulan, operativos en Austria. Se trata de unos vehículos diseñados en los años noventa por ingenieros españoles de la empresa SBS y austriacos de Steyr. Ambas compañías forman actualmente parte de GDELS.
Este blindado cuenta con un diseño modular y arquitectura abierta, que permite la instalación de cañones que van desde el calibre de 25 mm hasta 120 mm y misiles guiados antitanque. El peso varía de 30 a 45 toneladas y puede acomodar en su interior hasta 11 personas. Esta versatilidad hace que pueda actuar incluso como tanque ligero (LT) o tanque de batalla principal mediano (MMBT). Además de por España y Austria, también ha adquirido este modelo Reino Unido y un cliente de Asia Pacífico que el fabricante no especifica, si bien el pasado octubre trascendió la compra por parte de Filipinas de carros basados en el Ascod 2 de GDELS.
El programa Checo contempla la compra de 210 blindados, la mayoría de ellos como BVP, aunque también requiere versiones de mando, reconocimiento, ingeniería, rescate, medicalizada y de observación para artillería. Los BVP deberán acoger a 11 soldados y estarán armados con un cañón de 30mm.