Airbus estudia llevar ante el juez el bloqueo a las exportaciones de material militar que Alemania tiene decretado hasta el próximo septiembre. La multinacional europea se está planteando recurrir esta medida, adoptada por Berlín tras la desaparición del periodista Jamal Kashoggi en un consulado saudí, que afecta directamente a una partida de helicópteros de la empresa fabricados en la planta germana de Donauwörth, al sur del país, y a un sistema de protección de fronteras. El veto alemán también afecta directamente al programa de aviones de combate Eurofighter, en el que Airbus es socia junto a BAE systems y Leonardo. Riad está pendiente de firmar la compra de 48 unidades de este modelo por más de 11.000 millones de euros, tras haber comprado anteriormente 72 aparatos.
El suministro de los helicópteros y los sistemas fronterizos a los que se refiere la información sobre la posible denuncia de la empresa, revelada por el rotativo alemán Der Spiegel, también se estima en miles de millones de dólares. Airbus aduce que este material no es estrictamente armamento, por lo que debería quedar fuera del veto a Riad.
Berlín optó a finales de marzo por prorrogar otros seis meses el veto a la exportación de equipos de defensa a Riad hasta, al menos, el próximo septiembre. Para el responsable de la división Airbus Defence and Space, Dirk Hoke, “la conducta del Gobierno federal fuerza a Airbus a no poder cumplir contratos en firme con clientes”. La medida, continúa, “no sólo es dañina para el negocio, sino que tampoco es razonable para un accionista de Airbus como el Gobierno alemán”.
Alemania vetó el pasado octubre el suministro de material de defensa al reino de Oriente Medio como respuesta a la intervención bélica de este país en Yemen y tras la desaparición del periodista Jamal Khashoggi, presuntamente a manos de agentes saudíes. Riad es un cliente importante de la industria militar alemana. En total, Berlín autorizó en 2018 la venta de este tipo de material a ese país por un valor de 416 millones de euros. Operaciones así ya no son posibles ahora, y las consecuencias no solo afectan a las ventas directas, sino también a las de aquellos socios que utilizan componentes alemanes en sus productos.
Arabia Saudí lidera la coalición internacional que en 2015 inició una ofensiva contra los rebeldes hutíes en Yemen, en apoyo del Gobierno yemení, y que ya suma al menos 10.000 muertos.
En los últimos años Alemania ha optado en distintas ocasiones por vetar sus exportaciones militares a Arabia Saudí a cuenta de las carencias en el respeto de los derechos humanos de este país. Se trata de una medida que Berlín viene adoptando y echándose atrás periódicamente en los últimos años, y que afecta a uno de sus principales clientes de material militar, como ha venido informando Infodefensa.com.
A pesar de que la coalición entre conservadores y socialdemócratas que gobierna Alemania acordó el veto al envío de material militar a Arabia Saudí, existen discrepancias entre los dos partidos que la forman. Miembros de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merkel han mostrado su temor a que se esté poniendo con esta medida en peligro a la industria y los empleos del país y han llegado a mostrar su disposición a acercar su posición a Francia y Reino Unido, países que han expresado oficialmente sus críticas a la decisión alemana, de la que se sienten perjudicados porque les impide completar sus propias exportaciones cuando estas cuentan con elementos germanos. Al mismo tiempo, desde el SPD (Partido Socialdemócrata de Alemania), que forma la parte minoritaria del ejecutivo de coalición, abogan por ser más restrictivos con los envíos a Riad.
En este contexto, sin embargo, el Consejo de Seguridad Federal de Alemania dio luz verde a mediados del mes pasado al envío de tecnología para la producción de semirremolques de la empresa Kamag, con sede en Francia, que posteriormente se enviará a Arabia Saudí.