El Ministerio de Defensa ha puesto en marcha un plan para la actualización del sistema de inteligencia Santiago dotado con un presupuesto de más de 300 millones de euros.
Este plan tiene como finalidad la extensión de vida de este sistema de guerra electrónica hasta la entrada en servicio de la segunda fase. En términos generales, apuntan fuentes oficiales a Infodefensa.com, dicho plan establece una completa actualización de todos los subsistemas de captación actuales para que éstos puedan hacer frente a los retos previsibles a corto y medio plazo en materia de captación de señales, con un plazo de ejecución que abarca desde 2023 a 2028.
Si bien, las inversiones en este sistema se extenderán hasta 2033, según el calendario previsto por el ministerio, al que ha tenido acceso este medio.
El programa Santiago arrancó en su primera fase en 1991, con el propósito de implantar un sistema de obtención de información electrónica mediante la captación de señales de comunicaciones, electrónicas, visibles y de infrarrojos, junto con los medios para el procesado y distribución de la información para cobertura de la conocida como Área Estratégica de Interés Nacional.
En su segunda fase, el programa tiene por principales objetivos complementar y actualizar tecnológicamente los medios ya existentes en el sistema Santiago, adecuándolos al grado previsto de evolución, así como dotar a esos medios con cierta capacidad de proyección en respuesta a las nuevas necesidades y a los nuevos escenarios de actuación.
El programa también se marca como objetivo mantener y potenciar las capacidades de la industria española de interés para el Ministerio de Defensa, así como mantener un alto grado de soberanía nacional sobre los medios de producción y desarrollo de las capacidades que aplican al propio proyecto Santiago.
Entre las empresas españolas que participan en el programa se encuentran Indra, Inetum, Sener, GMV o Siadde. Indra, por ejemplo, trabaja en nuevo sistema de inteligencia de señales (Elint). Por su parte, Inetum su hizo recientemente con un contrato de más de ocho millones de euros para la puesta a punto de los sistemas de inteligencia de comunicaciones (Comint).
Este citado plan de actualización del sistema Santiago es uno de los proyectos aprobados a mediados de abril por el Gobierno en el Consejo de Ministros, entre los que también destaca la compra de nuevos misiles Mistral 3 o el programa para la adquisición de RPAS Micro para las Fuerzas Armadas.
Programa Santiago
El Programa Conjunto de Guerra Electrónica Santiago está integrado por varias plataformas y subsistemas (aéreos, terrestres y navales) equipados con sensores que actúan de forma interconectada en la banda radar, comunicación u optrónica, operados por los Ejércitos y bajo la dirección del Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (Cifas).
El objeto principal del programa, clasificado como secreto por Defensa, es la captación de emisiones electromagnéticas y de imágenes en las zonas definidas como de interés estratégico para la seguridad nacional.