El BAM Tornado expulsa a barcos británicos de aguas próximas a Gibraltar

El Buque de Acción Marítima (BAM) Tornado de la Armada española expulsó el pasado fin de semana a varios barcos británicos comerciales de aguas próximas a Gibraltar. La acción provocó la denuncia del Gobierno de Gibraltar, sin embargo España defiende que el patrullero aplicó la normativa internacional en aguas de soberanía española, de acuerdo con el Tratado de Utrecht.

Según medios británicos, el Tornado solicitó el domingo por radio a embarcaciones comerciales fondeadas en el lado este del Peñón que abandonarán "las aguas territoriales españolas". La Autoridad Portuaria de Gibraltar comunicó entonces a los barcos que hicieran caso omiso de la orden, mientras que la Royal Navy envió dos lanchas a la zona.

El Ejecutivo gibraltareño aseguró en una nota que a continuación "el buque de guerra español navegó lentamente a lo largo de la costa de Gibraltar con sus armas descubiertas y tripuladas".

El Ministerio de Exteriores español, por su parte, explicó que "las aguas que rodean el Peñón de Gibraltar son mar territorial español donde, como estado ribereño, España proyecta su soberanía de acuerdo con el derecho internacional. Respecto a buques de terceros estados rige el derecho de paso inocente. El Tornado observó que algunos buques en la zona no se conducían conforme a dicho derecho de paso inocente y les señaló dicho incumplimiento".

Desde el Ministerio de Defensa añaden que el buque militar está desplegado en el estrecho de Gibraltar, mar de Alborán y golfo de Cádiz en operaciones de vigilancia y seguridad marítima en aguas de soberanía y espacios marítimos de interés nacional. Según el departamento dirigido por Margarita Robles, el BAM avistó a tres barcos mercantes que incumplían la normativa marítima en aguas españolas, al estar parados en vez de navegar cumpliendo con su derecho de paso inocente. Defensa concluye que el Tornado alertó a las embarcaciones y éstas abandonaron la zona.

El paso inocente se define en el artículo 19 de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar como aquel que "no sea perjudicial para la paz, el buen orden o la seguridad del estado ribereño".

La soberanía de las aguas adyacentes a Gibraltar es una cuestión que genera incidentes cada cierto tiempo. Reino Unido afirma que la presencia de buques españolas representa una incursión en las aguas territoriales británicas del Peñón y, por tanto, una violación de la soberanía. Mientras que España considera que son aguas territoriales españolas, puesto que en el Tratado de Utrecht solo se cedieron la ciudad, el castillo, las defensas y fortalezas y el puerto. Por lo tanto, las únicas aguas que España reconoce como británicas son las del puerto.