Solo 15 países cumplirán el compromiso del 2 con la OTAN en 2024

La OTAN estima que únicamente 15 de sus 28 miembros alcanzará en 2024 el objetivo de destinar el 2 por ciento de sus PIB a defensa. El secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, ha explicado este martes que para este año se prevé “que ocho aliados cumplan el objetivo” acordado en septiembre de 2014 durante una cumbre de la organización celebrada en Gales, Reino Unido. En aquel momento, apenas tres países destinaban el 2 por ciento del PIB a defensa.

Al año siguiente los únicos en alcanzar la cuota eran Estados Unidos (el 3,6 por ciento de su economía lo dedicó en 2015 a gastos militares), Polonia (2,2 por ciento), Reino Unido (2,1 por ciento) y Estonia (2 por ciento).

A este club se unió Rumanía el año pasado y Letonia y Lituania esperan alcanzarlo durante este 2018. En total, la OTAN prevé que para el año 2024, que es el fijado para lograr el hito, “15 aliados al menos gastarán el 2 por ciento del PIB o más en defensa”, según su secretario general.

Desde la llegada el año pasado del presidente Donald Trump a la Casa Blanca se han acrecentado las exigencias de Estados Unidos a sus aliados europeos para que cumplan con sus compromisos con la Alianza Atlántica. Desde ese momento el interés por procurarse una defensa propia, menos dependiente de los norteamericanos, ha aumentado en el viejo continente.

En este contexto, España ha planteado un incremento del 80% de sus partidas de defensa, hasta alcanzar los 18.000 millones de euros en 2024. Sin embargo este ascenso solo le permitirán llegar al 1,6 por ciento de su PIB, aún lejos del 2 por ciento marcado en Gales, que en todo caso no supone un compromiso obligado, sino una apuesta por aproximarse para los países que aún están lejos de conseguirlo.

Tampoco se prevé que lleguen en 2024 al objetivo Alemania e Italia. Francia, por su parte, ha anunciado un ambicioso plan que le llevará a incrementar sus gastos militares un 23% en lustro comprendido entre 2019 y 2023 respecto del periodo de cinco años inmediatamente anterior (2014-2018).

Para Stoltenberg, las previsiones marcan “un progreso sustancial y un buen punto de partida. Pero nos queda todavía un largo camino” en el objetivo de alcanzar “el reparto justo de la carga” en defensa, lo que considera “crucial para nuestra seguridad compartida”.