F-16, A-29B y MH-60M en el cambio de mando de la FACh

El general del aire, Arturo Merino, asumió como nuevo comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) en la ceremonia de cambio de mando que se realizó ayer en la base aérea El Bosque de la Escuela de Aviación en Santiago. El evento estuvo encabezado por el presidente de la República, Sebastián Piñera, quien tuvo palabras de elogio para el general saliente, Jorge Robles, por su gestión de cuatro años como líder de la institución.

En su discurso, el general Robles señaló que los parámetros en los que basó su gestión fue la identidad, el compromiso esencial de tener una Fuerza Aérea sólida, disciplinada y prestigiada, e hizo un llamado a la inversión tecnológica del sistema aerospacial por el potencial para el desarrollo del país.

Referente a su Informe de Gestión, destacó la incorporación de los seis nuevos helicópteros Black Hawk, la implementación de salas cunas en las unidades, y el cuidado a los adultos mayores que realiza el voluntariado de esposas de oficiales en el Consejo Nacional de Protección a la Ancianidad (Conapran).

"Camaradas de la Fuerza Aérea, cada uno de ustedes tiene un lugar en mi mente y en mi corazón. Agradezco su compromiso y entrega por seguir escribiendo la maravillosa historia de la Fuerza Aérea de Chile, de la cual ya somos parte de un capítulo apacionante. Hoy, los insto a seguir constribuyendo, cada día, por alcanzar sus propios sueños, con la firme convicción que somos la Fuerza que une a los chilenos, a través de los caminos del aire, que nos permite continuar abriendo los horizontes de nuestra patria, y, siempre, volar más alto", señaló el general Robles.

Desfile aéreo y terrestre

Posterior a su despedida, se dio lectura al Decreto Supremo que nombró al general Merino como nuevo comandante en jefe de la FACh, con vigencia hasta el 5 noviembre de 2022. Luego, la banda instrumental de la Escuela de Especialidades interpretó el himno Camaradas de la Fuerza Aérea, al momento que un F-16 MLU se desprendió de una formación de cinco aviones, simbolizando el alejamiento de Robles. El desfile aéreo y terrestre, estuvo cargo del jefe de las fuerzas y comandante de la Guarnición General Aérea de Santiago, general de brigada aérea Hugo Rodríguez.

Encabezaron el desfile terrestre los estandartes de combate de la totalidad de las unidades operacionales de la Fuerza Aérea de Chile, mientras que, desde el aire, sobrevoló la Escuadrilla de Alta Acrobacia Halcones con cinco Extra 300L; una bandada de 15 aviones Enaer T-35 Pillán de la Escuela de Aviación; y 18 aviones Lockheed Martin F-16 Block 50 y MLU de los Grupos de Aviación N° 3, N° 7 y N° 8.

También desfilaron diez aviones A-29B Super Tucano del Grupo de Aviación N° 1 (algunos recientemente adquiridos a Embraer); y aeronaves del Grupo de Aviación Nº 10, tales como un Boeing KC-135E Stratotanker, un avión de alerta temprana Boeing EC-707C Cóndor, y un Boeing C-767C junto a dos Gulfstream G-IV, así como cuatro Lockheed Martin C-130 Hercules de las versiones B, H y KC-130.

Después correspondió el paso del Regimiento de Artillería Antiaérea y Fuerzas Especiales y el sub escalón Unidades Terrestres de Combate, compuesto por unidades de despliegue rápido conformadas por una compañía de Fusileros Antiaéreos y una compañía de Fuerzas Especiales.

Para concluir el desfile, hizo su presentación una formación de seis helicópteros Sikorsky Black Hawk (un UH-60L y cinco MH-60M), seguida de seis Bell UH-1H Iroquois y tres Bell 206B Jet Ranger III del Grupo de Aviación Nº 9.

*Foto del Boeing EC-707C Cóndor de Fabián González.