Navantia acude este año por primera vez a UNVEX y lo hace con dos objetivos principales, la promoción de sus embarcaciones autónomas, como el USV Vendaval, y de sus vehículos terrestres no tripulados. De hecho, Navantia firmó durante la inauguración de la feria un acuerdo con Urovesa precisamente para el desarrollo de un UGV.
El director comercial de sistemas de Navantia, Alfonso Cardona, explicó que, para Navantia, “los sistemas no tripulados son clave para el futuro de nuestros productos”, y destacó que, en este sentido, “UNVEX es una oportunidad de mostrar nuestros desarrollo y capacidades en este ámbito”.
Cardona aseguró que, además, UNVEX no solo les permite mostrar sus últimas novedades, sino conocer las del resto de la industria y facilita “la colaboración con empresas de UAV para la integración en nuestros sistemas de mando y control o plataformas navales”.
Objetivos aparte, lo que Navantia llevó a la feria de drones fue su Vendaval, un USV concebido para tareas de vigilancia, apoyo humanitario, salvamento en naufragios, trabajos medioambientales “o cualquier otra misión que se nos ocurra”, apuntó el director comercial de sistemas del astillero. El sistema ya funciona en el puerto de Ceuta, donde se integra en un concepto mucho más amplio de puerto seguro, ya que permite la protección de una infraestructura crítica como es esta desde la lámina de agua hasta bajo ella pasando por los alrededores del propio puerto.
También estuvo en UNVEX el director de la autoridad portuaria de Ceuta, César López, como representante de la primera ciudad en España que utiliza una tecnología USV. López aseguró que “para Ceuta es una grandísima oportunidad estar en UNVEX al lado de Navantia”, porque les permite estar al día de las últimas tecnologías y al mismo mostrar al reto de interesados los avances ceutíes aprendidos en el uso del Vendaval.
Respecto al USV Vendaval, que llegó a Ceuta a finales de 2019 y entró en servicio operativo a principios del 2020, “forma parte de un sistema cuya misión es la vigilancia de la zona portuaria, control de tráfico marítimo, se pueden desarrollar otras operaciones complementarias, colaborar en búsqueda y rescate, mediciones, seguir manchas o contaminaciones, etc”, explicó López.
El Vendaval es el primer vehículo de superficie no tripulado comercializado y operativo en misiones reales en España. Está equipado con un conjunto de sensores requeridos por el cliente, como los radares, sonares, GPS, navegadores inerciales, estación meteorológica, cámaras infrarrojas, cámaras estereoscópicas, cámaras 360º y un sistema AIS. Estos sensores pueden ser gestionados de forma remota desde un centro de control en tierra o instalado en otro barco.
La embarcación puede ser gobernada de forma totalmente autónoma, siguiendo una ruta preestablecida, o teleoperado desde un centro de mando y control, tanto en modo semiautomático como en modo tripulado.Además, en caso de que haya que abortar la misión, el sistema dispone de un modo de regreso automático y es capaz de detectar posibles colisiones y evitarlas de forma autónoma.
El sistema de Navantia también puede incorporar altavoces y focos para evitar que las embarcaciones entren en zonas de peligro para los seres humanos, como también cañones de agua para sofocar incendios.