Corea del Sur prepara su ingreso al club de países con portaaviones

La Agencia de Adquisiciones de Armamento de Corea del Sur (DAPA) ha revelado la primera reunión que este martes han mantenido militares e investigadores sobre el desarrollo de tecnologías básicas para construir el primer portaaviones del país. Con este encuentro Seúl inicia el proceso de desarrollo tecnológico que le permitirá disponer de una capacidad con la que actualmente solo cuentan nueve países: Estados Unidos, China, Italia, Reino Unido, Francia, India, Rusia, España y Tailandia. Japón también ha revelado sus planes para reconvertir dos de sus buques actuales, de la clase Izumo, en portaaviones, para lo que ya ha encargado 42 cazas F-35B con los que dotarlos y avanza en los detalles de las futuras plataformas.

Los planes coreanos, recogidos por el periódico local The Korea Herald, contemplan comenzar a operar con el primer portaaviones de su historia en 2033. Ese año, por tanto, se unirá a un club en el que aún no es seguro que sigan perteneciendo países como España, cuyos aviones de combate AV-8B Harrier Plus II difícilmente podrán alargar su vida operativa hasta entonces y tampoco se ha resuelto aún la compra del único modelo avión que puede sustituirlos, el F-35B.

En la reunión del martes se revisaron los planes de desarrollo de tecnologías para un proyecto de un buque de 40.000 toneladas al que la DAPA calcula un coste de dos billones de wones, 1.500 millones de euros al cambio actual.

Seúl inició en julio del año pasado sus planes para dotarse de esta capacidad y hace un año encargó a la firma local Hyundai Heavy Industries el diseño del barco.

Tecnologías protegidas

Entre las tecnologías que Corea debe desarrollar para dotar a su futuro portaaviones se encuentran algunas que ya emplean otros países pero que no están dispuestos a transferir, como los materiales empleados para proteger la cubierta de vuelo de los portaaviones para poder acoger operaciones en vertical de aviones VTOL (siglas que identifican a los aparatos capaces de despegar y aterrizar verticalmente). Seúl espera tener listas en 2024 las tecnologías centrales con las que se equipará su futuro buque.