El general Martínez promete probidad en la gestión de fondos

El general Ricardo Martínez reiteró el compromiso de probidad y transparencia en la gestión de dineros públicos al asumir la comandancia en jefe del Ejército de Chile. La nueva autoridad castrense reemplazó en el cargo al general Humberto Oviedo, quien se acogió a retiro tras liderar la institución en el período 2014-2018.

La ceremonia de cambio de mando se efectuó el viernes 9 de marzo en la Escuela Militar y fue encabezada por la presidenta Michelle Bachelet en uno de sus últimos actos como mandataria. La presidenta impuso al general Martínez la condecoración Collar de la Gran Cruz e hizo entrega del sable del general José Miguel Carrera, primer comandante en jefe del Ejército y símbolo de autoridad y mando de sus sucesores.

La ceremonia contó con una nutrida presencia de invitados nacionales y extranjeros, entre los que destacaron los comandantes en jefe de los ejércitos de Ecuador, Perú y Uruguay; los jefes de Estado Mayor de los ejércitos de Argentina y España; el comandante general del Ejército Sur de Estados Unidos; el comandante del Departamento Militar de Texas y el segundo comandante de la 36 División de Infantería del Ejército de Estados Unidos.

Compromiso con Chile

En el discurso con motivo de la asunción del cargo, el general Martínez se comprometió a entregar todas sus capacidades y competencias al servicio de Chile, así como también trabajar de manera incansable con las nuevas autoridades que asumieron el 11 de marzo para que la institución sea más conocida y valorada.

El comandante en jefe del Ejército de Chile expresó que asumirá con responsabilidad la tarea de asegurar al país la operacionalidad y disponibilidad de medios, la correcta y eficiente administración de los fondos empleados en las tareas que establece el mandato constitucional y proporcionar mejores condiciones de trabajo y bienestar para los integrantes de la institucion y sus familias.

El general Martínez indicó que recibe una institución con un alto nivel de alistamiento, reconocida regionalmente por su profesionalidad y dotada de capacidades polivalentes que le permiten apoyar a la población civil en catástrofes naturales.

En cuanto al Plan Desarrollo Estratégico Ejército 2026 y la definición del tamaño de la Fuerza Terrestre, se seguirá trabajando para proporcionar los antecedentes a la autoridad política para que determine que tipo de estructura se requiere para garantizar la seguridad del territorio.

La ceremonia concluyó con un desfile en el que participaron la Escuela Militar, la Escuela de Suboficiales, la Escuela de Infantería, el Destacamento de Montaña N°3 Yungay y la Brigada de Operaciones Especiales Lautaro.