El Ministerio de Defensa ha autorizado la creación del denominado Centro de Estudios Estratégicos del Ejército del Perú (Ceeep). La creación del Ceeep tiene el visto bueno de la Oficina General de Asesoría Jurídica del Ministerio de Defensa, de la Comandancia General del Ejército del Perú, del Despacho Viceministerial de Políticas para la Defensa, del Despacho Viceministerial de Recursos para la Defensa, de la Dirección General de Educación y Doctrina, de la Dirección General de Planeamiento y Presupuesto, entre otros.
En realidad una iniciativa del Ejército, el Ceeep es ahora una unidad orgánica del instituto armado, dependiente del Comando de Educación y Doctrina del Ejército (Coede).
Funciones
Las funciones generales del Ceeep son realizar análisis e investigaciones estratégicas relacionadas a la seguridad, defensa y la profesión militar que faciliten la gestión estratégica institucional y el proceso de toma de decisiones de la Comandancia General del Ejército y su Estado Mayor General, fomentando el pensamiento estratégico y el intercambio de ideas con diversos actores de la sociedad y de la comunidad académica nacional e internacional.
Sus funciones específicas son: 1) promover la gestión del conocimiento y el desarrollo del pensamiento estratégico entre los miembros de la institución armada, facilitando la generación de solluciones a los desafíos que impactan el desarrollo del Ejército del Perú; 2) realizar análisis e investigaciones en temas vinculados a la seguridad y defensa, incluyendo temas estratégicos claves identificados por el Ejército; 3) fomentar las relaciones y el intercambio de ideas con la academia y la sociedad civil.
Retos
Cabe indicar que no resulta complicado percatarse de los principales retos que enfrenta el Ejército del Perú y saltan a la vista de la tropa. Tener tanques y vehículos blindados con 40 años de antigüedad, no disponer de una estructura de comando y control al día, con acceso computarizado desde el nivel del soldado de a pie hasta el Cuartel General del Ejército (había un requerimiento en ese sentido, con una proyección de costo de 140 millones de dólares, si la memoria no falla); no incorporar tecnologías militares que están demostrando gran efectividad en el campo de batalla moderno, así como la importancia estratégica de tener a la tropa entrenada y preparada son algunos de los tremendos problemas que tiene delante el alto mando del Ejército para devolver a la institución al cauce principal de sus obligaciones constitucionales, en contraposición a la tendencia de los últimos años en el Poder Ejecutivo de pretender convertir al glorioso Ejército del Perú en una especie de anexo del Instituto de Defensa Civil y la escasez de presupuesto para modernizar equipos millitares.