Fernando Seco Lapiedra, presidente y fundador de la Asociación de Empresarios del Sur de España (Cesur), es un modesto empresario del sector de las nuevas tecnologías, donde participa en las sociedades Easytosee (Ec2ce), Bluumi y Footers. También es periodista y, durante diez años, estuvo al frente de la fundación sevillana Antares Foro.
Nacido hace 53 años, Seco ha desarrollado prácticamente toda su vida profesional en Sevilla, ciudad a la que llegó desde Bilbao para abrir la delegación del periódico Expansión en Andalucía en 1989. Su trayectoria profesional como periodista -especializado en economía, empresa y finanzas- le ha permitido obtener un gran conocimiento de la realidad económica andaluza y de sus principales protagonistas.
Con motivo de la jornada empresarial organizada por Cesur el pasado 21 de noviembre en Sevilla bajo el título, Oportunidades de negocio en la industria española y europea de defensa, aeronáutica y espacio, Infodefensa.com ha charlado con él sobre la situación actual del sector de la defensa en España.
¿Cuál ha sido su motivación para organizar esta jornada empresarial? ¿Cuáles son sus objetivos?
Uno de nuestros fines es generar actividad económica y más empleo, y ayudar a las empresas a buscar nuevas oportunidades. El sector de la Defensa es una palanca importante de modernización, al tener que invertir más que la media en I+D+I y aplicar al sector civil sus progresos. Creo que es una buena ocasión para ofrecer un salto cualitativo a nuestras empresas.
¿Qué opinión le merece que Andalucía sea la segunda Comunidad Autónoma con mayor peso en el sector de la defensa?
Es una apuesta decidida de las instituciones públicas por este sector que, como digo, tiene un efecto multiplicador positivo sobre el resto del tejido productivo.
El Gobierno acaba de aprobar la nueva Ley de Contratación para el Sector Público, ¿cree que esta nueva legislación hará más eficaz los procedimientos de contratación?
Sin conocer a fondo la ley, desde luego hacía falta una reforma y confío en que, efectivamente, sea más eficaz por transparente y rigurosa.
En su programa, entre otras premisas, explican que especialmente quieren incorporar nuevas empresas al ámbito de la industria de Defensa ¿Por qué este sector?
Este sector está en la vanguardia de la investigación y el desarrollo, destinando muchos recursos a ello. Además, son múltiples las aplicaciones a otros sectores como el energético o el agroalimentario, por poner dos ejemplos, que hacen mucho más eficaces sus rendimientos. Pensemos en la energía solar o los drones para uso agrario, por ejemplo. Eso es gracias a la industria de la defensa.
España se acaba de incorporara a la Cooperación Estructurada Permanente de la Unión Europea (Pesco) que plantea, entre otras medidas, aumentar los presupuestos de defensa ¿Qué opina sobre esto?
Con independencia de que fue una promesa de la ministra al inicio de su mandato, es positivo aumentar esos presupuestos por los efectos positivos directos e indirectos que tiene. La menor aportación de Gran Bretaña y Estados Unidos a la defensa común europea obliga a aumentar esos presupuestos. Pero aun sin esta razón hubiera sido deseable que se aumentaran. Defensa lleva demasiado tiempo siendo el patito feo de los presupuestos. Hay que saber comunicar los efectos positivos que tienes.
Siguiendo en el plano europeo, ¿qué oportunidades ofrecerán para las empresas las iniciativas del Plan de Acción Europeo de Defensa (EDAP)?
Sin duda significa una oportunidad que pasa necesariamente por asociarse con otras empresas europeas. Estamos en un mundo global y toca hacerlo realidad. Es un reto apasionante compartir proyectos, inversiones, conocimientos con personas que pueden aportarte mucho y viceversa.
Haciendo balance de los últimos años, ¿cree que las oportunidades de negocio en la industria española se han incrementado? ¿Cómo prevé que se desarrollarán de cara al futuro?
Las oportunidades se han incrementado, pero eso solo es el principio. Se trata de aprovecharlas y desarrollarlas. España necesita un tejido industrial con más peso en el PIB y Andalucía también lo necesita. Es fundamental para una estructura productiva y de empleo sana, y esto es fundamental para una estabilidad social. Dependemos demasiado de sectores cíclicos. Para conseguirlo hay que invertir más y tener una mano de obra más cualificada.