La compañía israelí Elbit Systems ha desarrollado un sistema de inteligencia celular activa que neutraliza las comunicaciones vía móvil de terroristas y criminales. Así definen sus desarrolladores este dispositivo, bautizado como SigmaCell, presentado la semana pasada en la exhibición de seguridad y defensa parisina Eurosatory.
El nuevo sistema se basa en la experiencia en inteligencia de señales de la empresa. Está diseñado para detectar, identificar, interceptar y mostrar detalles de dispositivos telefónicos móviles y su ubicación precisa. Con él se cubre todo el espectro de señales celulares (GSM, UMTS y LTE), es capaz de capturar cientos de dispositivos al mismo tiempo y puede operarse a distancia a través de una web sobre la base de la interfaz de usuario.
El SigmaCell está diseñado para integrarse con otros sistemas de inteligencia de Elbit Systems, como soluciones C4I (mando, control, comunicaciones, informática e inteligencia), sistemas de guerra electrónica y dispositivos de localización.
“Tanto de forma portátil como estacionaria, SigmaCell puede emplearse eficazmente en una variedad de entornos y escenarios operativos, como la frustración de actividades terroristas y criminales, la detección y prevención del uso de celulares en prisiones, la protección de fronteras y puestos de control, el rescate de supervivientes en catástrofes y la protección de instalaciones sensibles”. Además, añaden sus artífices, “resulta casi invisible e indetectable”.
El nuevo producto se suma al sistema de inteligencia de Cyber RF (ciber radio-frecuencia) de la compañía, denominado Signet, como parte de una línea de expansión de inteligencia de RF y sistemas de protección de datos. Su desarrollador explica que cuando los dos sistemas funcionan juntos se obtiene una solución híbrida integral para comunicaciones personales.
Elbit Systems es uno de los principales fabricantes israelíes de materiales electrónicos de defensa. Entre sus sistemas se encuentran equipos C4I (mando, control, comunicaciones, informática e inteligencia), aviones no tripulados, equipos de comunicaciones militares y sistemas electroópticos espaciales. La compañía alcanzó en 2017 una facturación de 3.380 millones de dólares y su cartera de pedidos se acercó al finalizar ese ejercicio a los 7.650 millones de dólares, casi un 11 por ciento más que un año antes. En torno al 73 por ciento de esa cartera provenía de encargos del exterior del país.