Una de las pocas dudas que generaba la elección del Centauro II, que siempre fue el gran favorito de la contienda, como el nuevo vehículo de combate 8x8 del Ejército de Brasil era que la torre Hitfact II, desarrollada por Leonardo y que equipa al blindado, emplea munición de 120 mm, que no se produce en el país. Ante esto, el Ejército ya se ha puesto manos a la obra y, junto a la Indústria de Material Bélico do Brasil (Imbel), ha iniciado los trámites administrativos necesarios para obtener las licencias de producción de la munición de 120 mm Target Practice-Tracer (TP-T).
Con la producción de la munición de ejercicio de 120 mm para el cañón del nuevo blindado 8x8, Imbel accede a un nuevo nivel tecnológico, iniciando el gradual y complejo proceso de asimilación de conocimientos, con el objetivo del dominio completo de la tecnología de fabricación de las demás municiones utilizadas por el cañón del Centauro II.
La nacionalización de la munición de entrenamiento es el primer paso para la futura autosuficiencia en tiros de 120 mm con diferentes cabezas de guerra, además de reducir costos durante el proceso de entrenamiento de nuevas tripulaciones, a las que hay que adiestrar en la custodia, manejo y desempeño de tiro de la nueva munición, inédita en el Ejército brasileño.
Compensación industrial del Centauro II
El contrato para la adquisición del Centauro II prevé un acuerdo de compensación mediante transferencia de tecnología en varias áreas y en lo que respecta a la fabricación de la municiónla tarea recaerá en Imbel. La firma ganadora, la italiana Consorcio CIO, ofreció transferir los conocimientos sobre la munición TP-T de 120 mm en un plazo de 36 meses, a partir de la adquisición del lote económico por parte del Ejército.
Los conocimientos y la capacidad para producir la munición HE (High Explosive - munición explosiva detonada por espoleta tras el impacto); la APDFSDS (Armor Piercing Fin Stabilized Discarding Sabot), comúnmente conocida como munición flecha; y la TPCSDS (Target Practice Cone Stabilized Discarding Sabot Tracer), así como componentes adicionales, forman parte de futuras actividades que se negociarán con el consorcio ganador.
Los disparos de 120 mm están encapsulados en plástico nitrocelulósico que se quema al disparar, dejando sólo la base del cartucho para ser desechada, a diferencia de la cápsula de latón utilizada en la munición de 105 mm. Además de ofrecer un rendimiento medio un 30% superior, los disparos de 120 mm no pesan mucho más que los antiguos cartuchos de 105 mm y alcanzan objetivos a mayor distancia con más precisión y energía.