La Defensa china ha estado reclutando pilotos de varios países, principalmente británicos, para formar a sus aviadores militares. Se trata de exmilitares que en su mayoría superan los 50 años de edad y que tienen experiencia en el manejo de aviones de combate como los Eurofighter Typhoon, Jaguar, Harrier y Tornado, y también helicópteros. No son los únicos. Pilotos australianos y canadienses también han sido contratados por las fuerzas chinas por sueldos que en algunos casos rondan los 270.000 dólares.
Con estas contrataciones China trata de conocer mejor los procedimientos de pilotaje occidentales, lo que le resulta útil para enfrentarse a posibles oponentes familiarizados con estas prácticas, como ocurriría principalmente en una guerra contra Taiwán, informa la BBC.
La aceptación de un contrato para formar a pilotos chinos no viola actualmente ninguna ley, pero ha puesto en alerta a las autoridades británicas y de otros países, que están buscando fórmulas para que no vuelva a ocurrir. El periódico británico Daily Mail apunta que también hay pilotos australianos y canadienses en la misma situación. “Se necesitan pilotos occidentales de gran experiencia para ayudar a desarrollar tácticas y capacidades de la fuerza aérea militar china”, ha resumido un funcionario occidental al medio público británico.
Cambiar la ley
Por su parte, el ministro de Estado para las Fuerzas Armadas y los Veteranos de Reino Unido, James Heappey, ha advertido de que su país debe cambiar la ley para que sus expilotos no vuelvan a transmitir información de inteligencia a China. De momento no hay evidencias de que ningún expiloto británico haya facilitado a China información que viole la ley de secretos oficiales.
Los primeros pilotos británicos reclutados por China fueron contratados en 2019, según han sabido las autoridades de Reino Unido. El proceso se ralentizó durante la pandemia ante las dificultades de viajar al país asiático por las medidas contra la expansión de la enfermedad. Ahora, en cambio, los intentos de estos reclutamientos se han incrementado. Incluso personal actualmente en servicio ha sido contactado, pero no hay conocimiento de que ninguno se haya comprometido con China.
Vídeo revelador
Los expilotos que sí han aceptado trabajar para Pekín son profesionales que provienen de las distintas ramas de las Fuerzas Británicas, incluidas la Marina Real (Royal Navy) y el Ejército (Army), además de la Fuerza Aérea (Royal Air Force), con experiencia en helicópteros y cazas Eurofigher, Jaguar, Harrier y Tornado, si bien no hay evidencias de que ninguno de ellos hubiera operado con aviones de combate de quinta generación F-35, aunque es un objetivo perseguido por el gigante asiático, según las sospechas vertidas en la información de la BBC.
Se sospecha que los pilotos han sido reclutados a través de intermediarios, y citan una academia de vuelo con sede en Sudáfrica. Algunas fuentes apuntan que la contratación de estos exmilitares se conoció a partir de unas imágenes de un accidente de un avión de combate chino, entre cuyos tripulantes, que lograron salvarse, se encontraba personal occidental.