El RPAS Predator B del Ejército del Aire y del Espacio español ha completado el primer vuelo en el aeródromo militar de Lanzarote.
El vuelo tuvo lugar a las 13:07 horas del pasado lunes 3 de octubre, con motivo de la certificación de la IOC (Initial Operational Capabilities) en su base de despliegue. Las operaciones se realizaron coincidiendo con el periodo de máxima afluencia civil y fueron perfectamente coordinadas con el aeropuerto internacional César Manrique. "El resultado obtenido fue un rotundo éxito", subraya el Ejército del Aire y del Espacio.
Este primer vuelo, señala, constituye un hito histórico para el aeródromo, y contó con la presencia del jefe del Mando Aéreo de Canarias, general de división Juan Pablo Sánchez de Lara. "Es uno más de una serie de simulacros que permitan comprobar la eficacia de los procedimientos y sistemas instalados en el aeródromo durante los últimos meses", explica la Fuerza Aérea.
El despliegue de Predator a Lanzarote comenzó a mediados de septiembre. A bordo de un avión de transporte A400M fueron trasladados en pallets material de dos aparatos y una estación de control desde el Ala 23 de Talavera La Real (Badajoz), base principal del sistema.
La operación desde la base canaria es uno de los hitos pendientes del programa para alcanzar la capacidad operativa final (FOC, por sus siglas en inglés), prevista para el próximo año. Estos RPAS, como publicó Infodefensa.com, participarán el próximo mes de noviembre en el ejercicio Sirio 22, las mayores maniobras anuales de adiestramiento avanzado de las unidades operativas de la Fuerza Aérea, que este año tendrá lugar en Canarias.
Operación desde Lanzarote
Los drones Predator B serán operados, tanto desde el propio aeródromo, como desde la base de Talavera la Real. El despegue y el aterrizaje se efectuará desde la base canaria, donde se trasladarán dos de las tres GCS (estaciones de control en tierra), más dos antenas para el lanzamiento y recuperación de la aeronave. La tercera GCS y la antena satelital se quedarán en Talavera.
Los pilotos harán despegar el avión desde Lanzarote con el apoyo de las citadas antenas y después transferirán el vuelo a otros pilotos situados en la base extremeña que operarán la aeronave a través del enlace satelital. En la maniobra de aterrizaje, los pilotos seguirán el proceso inverso; Talavera entregará de nuevo 'los mandos' del avión a Lanzarote.
El aeródromo canario ha sido preparado en los últimos años para acoger a los equipos responsables de la operación de estos sistemas remotamente tripulados. El Ejército del Aire y del Espacio ha dotado a esta base de torres especiales para instalar las antenas que hacen posible el aterrizaje y despegue seguros y ha construido canalizaciones que permiten la operación del sistema, de acuerdo con los más estrictos estándares de seguridad.