El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha adjudicado dos grandes contratos para la modernización de su arsenal de carros de combate. Por una parte ha encargado a la compañía General Dynamics Land Systems (GDLS) un número no revelado de carros de combate M1A2 Abrams de la variante SEPv3 por 4.620 millones de dólares (cerca de 3.600 millones de euros), y por otro ha ordenado a Honeywell un pedido de algo más de 1.105 millones de dólares (más de 900 millones de dólares) en motores AGT 1500 para impulsar a esos mismos blindados.
La versión SEPv3 es la configuración más avanzada de los Abrams estadounidenses. Según distintos medios internacionales, esta variante también prestará servicio en Marruecos, que en 2018 encargó 162 carros de combate Abrams a Estados Unidos.
Los nuevos Abrams M1A2 SEPv3 podrán albergar cualquier tecnología madura que el Ejército considere operacionalmente relevante. Estos blindados incluyen mejoras en la protección de la fuerza y en la supervivencia del sistema, y un incremento de su letalidad respecto a las variantes previas M1A1 y M1A2.
La renovada plataforma cuenta, entre otras mejoras, con un sistema combinado de radio que se integra con los sistemas de radios tácticas de mano Manpack que se emplearán en los futuros ABCT (equipos de combate de brigada blindada) del Ejército de Estados Unidos; con módulos de tecnología reemplazables; con un sistema electrónico contra artefactos explosivos improvisados; con munición dotada de enlace de datos de alta tecnología; con una unidad de potencia auxiliar que permite operar sistemas a bordo con una baja probabilidad de ser detectados durante operaciones silenciosas, y con un blindaje mejorado.
Más de 2.000 nuevos tanques
El Departamento de Estado de Defensa anunció la adjudicación del contrato para la adquisicón de carros de combate Abrams M1A2 SEPv3 por 4.620 millones de dólares el pasado viernes. Un día antes, la misma entidad reveló la concesión de otro encargo a Honeywell International para la compra de motores AGT (Automotive Gas Turbine) 1500 que impulsarán esos mismos blindados por un montante de más de 1.100 millones de dólares. Estos motores desarrollan una potencia de 1.500 CV, con los que mueven un carro de combate que mide 9,7 metros de largo por 3,7 de ancho y 2,4 de alto. Como arma principal, cada Abrams de la versión SEPv3 va dotado de un cañón de 120mm y ánima lisa M256.
El Ejército de Estados Unidos planea contar con más de dos millares de carros de combate de este tipo.