Nueva misión de vigilancia de buques de la Federación rusa. La Armada ha desplegado en los últimos días los patrulleros Atalaya y el BAM Tornado para seguir los movimientos de un submarino ruso en aguas de interés para España.
Los dos buques españoles monitorizaron el submarino por la costa atlántica hasta su entrada en el Mediterráneo, informó el Estado Mayor de la Defensa (Emad), que no ha dado más detalles sobre el sumergible en cuestión. Este tipo de actuaciones forman parte de las Operaciones de Presencia, Vigilancia y Disuasión (OPVD), bajo control operativo del Mando de Operaciones (Mopd).
Prácticamente todos los meses, la Armada activa unidades para vigilar a embarcaciones rusas en los espacios marítimos de interés para España. Hace un mes, el Ministerio de Defensa ya informó de la detección y seguimiento de un submarino ruso, en aquella ocasión, el Novorossiysk, en el mar de Alborán, el golfo de Cádiz y la fachada atlántica norte, como recogió Infodefensa.com.
Estas operaciones de vigilancia las ejecutan buques integrados en el Mando Operativo Marítimo (MOM), un órgano de la estructura operativa de las Fuerzas Armadas que se encuentra bajo el mando del Almirante de Acción Marítima y tiene sede en Cartagena.
Este organismo está subordinado al Jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad) responsable, a su nivel, del planeamiento, conducción y seguimiento de las operaciones permanentes de vigilancia y seguridad de los espacios marítimos de soberanía, responsabilidad e interés nacional.