La ministra francesa de las Fuerzas Armadas, Florence Parly, ha presidido el primer corte de metal del primero de los seis buques patrulleros, de 80 metros de eslora y 1.300 toneladas, que el país ha encargado para operar en sus territorios de ultramar.
Francia recibió entre los años 2017 y 2019 tres nuevas patrulleras destinadas a las Antillas y la Guayana Francesa, que serán completadas con otras seis que el presidente del país, Emmanuel Macron, anunció a finales del año pasado. Estos últimos irán destinados a Nueva Caledonia, Polinesia Francesa y la Isla de la Reunión, donde comenzarán a operar desde 2022, cuando está previsto que llegue el primer buque a Nueva Caledonia, y 2025, momento en el que previsiblemente se incorporará el último. La nave que ahora ha comenzado a construirse se completará en los astilleros que Socarenam, la firma encargada de construirlos, tiene en Saint-Malo, al oeste del país.
El programa, denominado POM, por las siglas de Patrouilleur d'Outre Mer (Buque de patrulla de ultramar), y administrado por la Dirección General de Armamentos (DGA), “fortalecerá significativamente los recursos de la Armada [francesa] para controlar las áreas marítimas” de los territorios franceses citados, según el comunicado emitido por la DGAM sobre este el inicio de construcción de los buques. Los nuevos buques mejorarán significadamente las capacidades de las actuales patrulleras P400, de menos de 55 metros de eslora, que prestan servicio en la zona, a las que doblan en carga y pasajeros que es capaz de transportar. Además contarán con un mayor alcance y la posibilidad de operar drones. De hecho, añade la fuente oficial, “el POM es la primera embarcación pequeña en operar un sistema de drones”.
Cada POM, cuyas baterías durarán 30 días y podrá alcanzar los 30 nudos, será operado por una tripulación de 30 personas y podrá acoger a otros 23 pasajeros (entre gendarmes y comandos, de acuerdo con la DGAM). Su armamento incluirá un cañón remotamente tripulado de 20 mm, más dos ametralladoras de 12,7 mm y otras dos de 7,62 mm. Además equipará dos lanchas de ocho metros y podré acoger un contenedor de 20 pies en cubierta, junto a su grúa de movimiento de cargas.
Los nuevos buques están concebidos para desarrollar misiones de soberanía y protección en las Zonas Económicas Exclusivas (ZEE) de Francia, intervenciones contra episodios de contaminación marina y en apoyo al medio ambiente, y operaciones de rescate y asistencia.
Cuando concluya la entrega de la última de las naves, en 2025, Francia habrá completado la renovación de la flota de patrulleros con base en sus territorios de ultramar, que estará formada por nueve unidades en total.