El ministerio de Defensa danés pide 2.900 millones para comprar 27 F-35A

El ministro de Defensa de Dinamarca, Claus Hjort Frederiksen, ha solicitado oficialmente a la Comisión de Finanzas del parlamento del país el dinero necesario para hacerse con los 27 aviones de combate F-35A que se acordó adquirir a mediados de 2016. En total solicita 16.374,4 millones de coronas danesas. Son casi 4.000 millones menos de las estimadas para esta operación cuando el parlamento la aprobó, pero curiosamente equivalen a casi la misma cantidad en dólares que entonces: 2.600 millones.

Ese volumen es el suficiente para hacer frente a la adquisición tanto de los aparatos como de sus correspondientes motores, cuatro simuladores avanzados para el entrenamiento de pilotos, piezas de repuesto y equipos de apoyo, entre otros elementos y servicios relacionados. De acuerdo con Nytkampfly, a esta cantidad se sumarán en el futuro otros 650 millones de coronas adicionales para acometer distintos trabajos de construcción en la base aérea de Skrydstrup, desde operarán los nuevos cazas.

El Gobierno de Dinamarca logró en 2016 el acuerdo del Parlamento para la compra de estos aviones de combate con los que reemplazar a su actual flota de cazas F-16, como publicó entonces Infodefensa.com.

Dinamarca es uno de los nueve socios del programa militar del F-35, que es el más caro de la historia, lo que en ningún momento ha supuesto una obligación para la adquisición final de los aviones. Los otros aliados en el desarrollo de esta aeronave liderado por la compañía norteamericana Lockheed Martin son Estados Unidos, Turquía, Italia, Australia, Países Bajos, Gran Bretaña, Japón y Noruega. La contribución danesa hasta el momento se acerca a los 300 millones de euros. El coste de todo el programa se calcula en torno a 400.000 millones de dólares (354.000 millones de euros).

El F-35 se impuso en el concurso danés al F/A-18 Super Hornet de Boeing y all Eurofighter de la corporación europea con el mismo nombre. El programa danés de compra deestos aviones prevé la recepción de los aparatos entre 2021 y 2026 en dos configuraciones diferentes. Un primer lote de diez aeronaves estarán configurados como TR-2 (siglas en inglés de la expresión Actualización de Tecnología 2) y los 17 restantes se corresponderán con la más avanzada TR-3. La decena inicial deberán ser actualizados más adelante a la TR-2.

El coste anunciado por el Ministerio de Defensa para esta compra equivale a pagar menos de la mitad de lo que el Reino Unido acaba de publicar que va a satisfacer por sus F-35B, específicamente preparados para aterrizar verticalmente. Esta última es una versión más cara, pero aun así, de acuerdo con Defense Aerospace, no queda claro en qué se basa semejante diferencia.