La Armada explica que "las unidades de la Fuerza de Guerra Naval Especial requieren de movilidad táctica terrestre adaptada a sus formas de actuación, que las capacite para ser empleadas en todo el espacio de batalla", lo que requiere disponer de "vehículos de rueda ligeros, que sean versátiles, con suficiente autonomía, de mantenimiento simple, robustos, con la suficiente potencia de fuego, autoprotección, comunicaciones y sistemas de navegación".Einsa se hizo a finales del año pasado con un contrato de la Armada para el suministro de diez Neton por un importe de 2,2 millones. Este vehículo ya se encuentra en servicio en el Mando de Operaciones Especiales (MOE).
El contrato forma parte de un plan para la renovación progresiva de los actuales escúteres submarinos de buceo por otros más modernos para mejorar la capacidad de inserción de la FGNE. A finales del año pasado, los ‘boinas verdes’ de la Armada ya recibieron tres nuevos vehículos, en concreto, el modelo Divejet RD2 de la firma alemana Rotinor, como publicó Infodefensa.com.Los requisitos técnicos mínimos que deben cumplir los vehículos son los siguientes: longitud máxima de 120 cm; peso máximo de 36 kg; velocidad de 7 km/h o superior; autonomía de al menos cinco horas a la mínima potencia; propulsión tipo jet para evitar enredos en la hélice; display o indicador para avisar de la profundidad, el rumbo o el tiempo; despliegue y lanzamiento en paracaídas; y operación a una profundidad de 60 metros.
Una treintena de efectivos de operaciones especiales de las Fuerzas Armadas españolas y la Guardia Civil han participado en el ejercicio Flintlock 23, celebrado durante la primera quincena de marzo entre Costa de Marfil y Ghana. Estas maniobras, de carácter anual, están organizadas y dirigidas por el Mando de Operaciones Especiales estadounidense para África (Socafrica).
Estos vehículos tienen capacidad para transportar hasta dos buceadores, utilizan propulsión eléctrica e incorporan una consola y accionamientos para que el piloto pueda controlar el vehículo y verificar su correcto funcionamiento, la autonomía restante, velocidad, profundidad y rumbo. Características del RD2.
La Armada detalla que “este tipo de equipos llevan en servicio en la Armada varias décadas y el modelo que está siendo utilizado actualmente es el Lar VI, del fabricante Draguer, en servicio desde el año 1999, y tras veinte años, la empresa anunció la discontinuidad de producción de sus repuestos a finales del año 2019”. Los repuestos disponibles de la Armada y los del propio fabricante solo aseguran la operatividad del material en servicio hasta finales de este año.
La reina Letizia ha amadrinado la entrega de la bandera de combate a la Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE), la unidad de operaciones especiales de la Armada con sede en Algameca (Cartagena). A su llegada al acto, celebrado el pasado martes en el muelle Juan Sebastián Elcano del puerto de Cartagena, la reina fue recibida por la ministra de Defensa, Margarita Robles; el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras; el jefe de Estado Mayor de la Armada, almirante general Antonio Martorell y el comandante de la Fuerza de Guerra Naval Especial, coronel Domingo Manuel García Nieto. Tras recibir honores de ordenanza, pasó revista a las tropas, acompañada por el jefe de Estado Mayor de la Armada, el jefe del Cuarto Militar y el jefe de la Unidad de Honores.