El tercer mandato de Angela Merkel al frente de Alemania, iniciado en diciembre de 2013 con los socialdemócratas (SPD) como socios de Gobierno, ha comenzado con una fuerte caía en la venta de material de defensa de la industria nacional al exterior. Según el Informe de Exportación de Armamento de 2014, aprobado este miércoles, el país vendió fuera 6.500 millones de euros en armas, la cifra más baja desde 2010 y un 22 por ciento menos que en 2013.
El portal de la radio germana Deutsche Welle recuerda que al asumir su cargo en el nuevo Gobierno el líder del SPD y actual vicecanciller y ministro de Economía y Energía alemán, Sigmar Gabriel, calificó de “vergüenza” que su país fuese el cuarto mayor exportador de armas del mundo. Según los datos registrados por el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (Sipri), Alemania movió entre 2010 y 2014 el 5% de todas las exportaciones de grandes armas convencionales del mundo. Anteriormente ocupaba un lugar aún más destacado, pero en el último lustro ha sido superado por China, a la que ya únicamente aventajan Rusia y Estados Unidos
Las cifras del Sipri, recogidos por Infodefensa.com, además revelan que en los últimos cinco años las exportaciones germanas de material de defensa han caído un 43 por ciento respecto a los cinco anteriores (2005-2009).
En todo caso, a pesar de la reducción, la exportación de sus armas de guerra –en las que se incluyen tanques, submarinos, aviones de combate y artillería y quedan fuera sistemas como equipos tecnológicos y software militar– se duplicó hasta alcanzar los 1.800 millones en el último ejercicio, informa la radio alemana a partir del citado informe oficial.
Polémica sobre Israel y Arabia Saudí
En el país resultan especialmente polémicas las ventas de 209 millones a Arabia Saudí, su sexto principal cliente, reino de Oriente Medio al que Berlín llegó a principios de año a dejar temporalmente sin suministrar armas por la “inestabilidad de la región”, como informó en su momento Infodefensa.com.
El principal receptor de las armas germanas es Israel, con 685 millones de euros, lo que también levanta algunos recelos por el uso que se podría dar a un armamento financiado en parte por los contribuyentes alemanes. Es el caso de los submarinos Dolphin II, cuya quinta unidad fue entregada recientemente por un coste de 600 millones, de los que 135 millones están financiados por Alemania. Estos buques podrían llegar a ser armados por misiles nucleares, un tipo de ingenios letales con los que se cree que cuenta Israel, aunque nunca ha sido confirmado oficialmente.