Un avión de transporte Let L-410 UVP-E20 de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) se precipitó a tierra en un accidente ocurrido, el 16 de agosto, en la Base Aérea Coronel José Enrique Soto Cano, de Palmerola, en Comayagua, al norte de Tegucigalpa, pereciendo el piloto mientras que otros dos tripulantes resultaron gravemente lesionados.
El avión accidentado, matrícula FAH-322 es uno de los dos aparatos adquiridos en 2015, a la empresa checa Let Aircraft Industries, y el primero en ser entregado en abril de ese año a la Fuerza Aérea Hondureña, tal como lo informó Infodefensa.
El piloto fallecido fue identificado por la FAH como el capitán de Aviación Olvin Emmanuel Flores Meraz, quien murió al instante, al impactar la aeronave L-410 que pilotaba contra un edificio de la base aérea. Los otros dos tripulantes, que resultaron lesionados, son el copiloto, un teniente de Aviación, y el mecánico.
El siniestro ocurrió durante la aproximación para aterrizar, cuando el L-410 se encontraba en un vuelo de adiestramiento y al parecer, según indican medios locales, habría tenido una falla en uno de sus dos motores, perdió altitud, de forma repentina, e impactó en unos cables del tendido eléctrico, lo que desestabilizó por completo su vuelo y lo precipitó a tierra cayendo sobre una de las edificaciones de la base aérea.
El L-410 es un avión de transporte comercial y táctico militar de ala alta y bimotor, de corto alcance. Tiene una capacidad de transporte de hasta 19 ocupantes y una capacidad de carga de 1.710 kilogramos.