La Armada española realizó el pasado sábado en aguas del Golfo de Cádiz un ejercicio de lanzamiento de misiles antiaéreos Standard SM-1 en el que participaron las fragatas Victoria F-82, Numancia F-83 y Canarias F-86 de la Clase Santa Maria. El objetivo de estas pruebas fue comprobar la eficacia de estos misiles y el correcto funcionamiento de los sistemas de armas.
Junto con las tres fragatas F-80 de la '41ª Escuadrilla de Escoltas' con base de Rota, la Armada desplegó la Cristóbal Colón F-105 perteneciente a la '31ª Escuadrilla de Escoltas' con base en Ferrol que realizó tareas de vigilancia.
Durante el ejercicio las fragatas efectuaron varios lanzamientos de misiles contra blancos aéreos teledirigidos tipo Scrab, de fabricación española. Estos objetivos “simulan diferentes perfiles de ataque de aviones o misiles que se aproximen a la fuerza naval”, explica la Armada.
Estas maniobras buscan comprobar el correcto funcionamiento de los sistemas de detección y de armas; como la dirección de tiro, el lanzador y los programas, así como probar la eficacia de los misiles antiaéreos Standard SM-1, fabricados por la compañía norteamericana Raytheon. Asimismo, sirven para elevar la preparación de las dotaciones de los buques en enfrentamientos antiaéreos con misil y con artillería principal.
El almirante de la Flota, Francisco Javier Franco Suanzes, acompañado del almirante de Acción Naval, Manuel Garat Caramé, siguieron el desarrollo del ejercicio a bordo de las fragatas Cristóbal Colón y Canarias.
La 41ª y 31ª Escuadrilla de Escoltas
La '41ª Escuadrilla de Escoltas' está constituida por seis fragatas de la clase Santa María y tiene su base en Rota. Los buques de la escuadrilla fueron construidos en España, el primero de ellos a mediados los años 80, y en la actualidad han terminado un proceso de modernización que les permitirá mantener y mejorar sus capacidades con el propósito de continuar operando con eficacia en los próximos años. Tienen una eslora de 138 metros y más de 4.000 toneladas de desplazamiento.
Por su parte, la '31ª Escuadrilla de Escoltas' está formada por cinco fragatas de la serie F-100, también denominada clase Álvaro de Bazán, construidas por Navantia y con base en Ferrol. Cuentan con el sistema de combate Aegis, que unido al radar multifunción SPY-1D, les proporcionan una gran capacidad de detección y combate antiaéreo. Estos buques disponen además de una evolución del misil utilizado en este ejercicio, el Standard SM-2, utilizado por los destructores de Estados Unidos.
Fotos: Armada