Robles descarta cambios inmediatos en las direcciones de CNI y EMAD

La ministra de Defensa, Margarita Robles, descartó este viernes, un día después de su toma de posesión, el relevo inmediato del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), general de ejército Fernando Alejandre, y del director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán. No obstante, sí confirmó en varias entrevistas televisivas que la reunión del Consejo de Ministros aprobará los primeros nombramientos de su nuevo equipo en Defensa.

"De momento, tranquilidad. En este Consejo de Ministros habrá algún nombramiento que hay que hacer", aseguró. Previsiblemente, todo apunta a que Secretaría de Estado de Defensa y Subsecretaría de Defensa por su rango serán los primeros departamentos en contar con un nuevo responsable.

El relevo de la cúpula militar es uno de los temas que la ministra podría afrontar durante su mandato. Estas declaraciones parecen descartar, por el momento, una revolución a corto plazo entre los responsables directos de las Fuerzas Armadas. En el caso del general Alejandre lleva poco más de un año al frente del Emad, su nombramiento tuvo lugar en marzo de 2017.

La dirección del CNI es otro de los puestos en los que podría haber cambios, después del regreso del centro de inteligencia a la estructura del Ministerio de Defensa. Al frente del organismo está desde hace nueve años el veterano general Félix Sanz Roldán, designado por Jose Luis Rodríguez Zapatero y que ha mantenido el cargo durante los dos Gobierno de Mariano Rajoy.

Sobre el cambio de ministerio del CNI, Robles también ha explicado que a lo largo de las negociaciones para la formación de Gobierno siempre se habló de un ministerio de Defensa con este organismo integrado.

Robles tomó posesión como ministra de Defensa ayer jueves en una ceremonia en la sede del ministerio del Paseo de la Castellana, donde pasó primera vez revista a las tropas junto con el Jemad y recibió la cartera del departamento de manos de su antecesora María Dolores de Cospedal. En su intervención, Robles apostó por mantener una "línea de continuidad" durante su estancia en el ministerio.