El Ejército quiere otro buque logístico más de nueva construcción

El buque de transporte logístico (BTL) Ysabel (A-06) tendrá más del doble de capacidad que los barcos Martín Posadillo y El Camino Español, a los que va a sustituir para dar servicio al Ejército de Tierra. Sin embargo, al tratarse de una única unidad, el servicio pierde flexibilidad, ya que únicamente puede operar en un único escenario al mismo tiempo. Tanto en el Ejército como en la Armada se espera poder contar con una segunda unidad para recuperar esa capacidad.

“Tanto el Camino Español como el Martín Posadillo tenían muchísima menos capacidad”, explica a pie del nuevo buque, en el Arsenal de Cartagena, su primer comandante, el capitán de fragata Pedro Antonio Pérez Núñez. “Lo que pasa es que [los anteriores] tenían la flexibilidad de ser dos unidades, por lo que podían estar operando a la vez en sitios diferentes”, añade.

Dentro de unos meses, cuando esté totalmente operativo, tras el proceso de “militarización” al que le va a someter la Armada, la nueva nave será capaz de transportar en torno a 5.000 metros lineales en vehículos ligeros a lo largo de sus seis cubiertas, repartidas en sus 149,38 metros de eslora y 21 de manga. En total, el Ysabel es capaz de desplazar hasta 16.361 toneladas a plena carga, frente a las apenas 6.860 que sumaban los dos barcos a los que reemplaza, dados de baja hace unos meses. “Con este [buque entregado a la Armada este jueves] tenemos mucha capacidad, pero de momento [es] un único buque”, resume el comandante.

El Ministerio de Defensa explicó hace unas semanas a Infodefensa.com que el Ejército de Tierra hasta el momento “no ha manifestado la necesidad de un segundo buque logístico”, con el que incrementar la flexibilidad de apoyo logístico, en los términos en los que apunta el capitán de fragata Pérez Núñez. Sin embargo, en el Ejército sí existe interés en una unidad adicional, y además de nueva construcción, y no de segunda mano, como el Ysabel, que desde 2003 ha prestado servicio como mercante a la naviera civil Suardiaz, a la que el Ministerio de Defensa adquirió el barco el pasado agosto por 7,5 millones de euros.

“Nos falta uno más”

En palabras del jefe del Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE), el teniente general Fernando Miguel García y García de las Hijas, “efectivamente, nos falta otro buque más”. Así lo ha apuntado este jueves tras el acto de entrega del Ysabel a la Armada (encargada de operarlo, aunque al servicio del Ejército). El MALE ha añadido que esa segunda unidad “sería un buque de nueva construcción”. En todo caso, ha aclarado, ese proyecto se podrá acometer “según las prioridades y la disponibilidad financiera”.

De momento, el Ysabel permitirá incrementar la capacidad de apoyo logístico que cumplían las anteriores dos unidades a las que sustituye. Eso ocurrirá cuando concluyan los trabajos a los que, tras su entrega el jueves, deberá ser sometido en Cartagena. “Lo llamamos militarizar el barco”, ha aclarado el Almirante Jefe de Apoyo Logístico de la Armada (AJAL), Aniceto Rosique Roca.

Estos trabajos incluyen el equipamiento de sistemas de comunicaciones militares seguras, la adopción de pañoles para munición y armas ligeras y la mejora de su habitabilidad, entre otros, según ha señalado junto al buque el AJAL. “Se va a ampliar la zona de habitabilidad, duplicando las camas”, ha explicado. El primer comandante de la nave, el capitán de fragata Pérez Nuñez ha concretado en este punto que la tripulación previa “del mercante tenía capacidad para 31 personas, más dos camas en la enfermería, y con la nueva dotación del Ysabel se pretende llegar a cerca de setenta, eso está todavía por definir exactamente”.

Aparte de contar con algunos sistemas de autodefensa, que también van a ser instalados en los próximos meses, la seguridad militar a este tipo de naves suelen brindarla otros buques escolta, como una fragata, una corbeta o incluso un submarino, según ha apuntado el AJAL.