Este documento ofrece un mapa único, útil y completo de los contratos que ha adjudicado el Ministerio de Defensa durante 2016. En él se destacan las empresas, los sectores, las cuantías de adjudicación con sus correspondientes bajas de precios, la actividad de los agentes contratantes, el número de competidores que optan a las licitaciones, los procedimientos que se emplean y la naturaleza de lo que demanda Defensa. Todo ello se analiza y se compara con los datos obtenidos desde 2013 en las anteriores ediciones de este estudio, lo que facilita la anticipación de las tendencias que podrían seguir las contrataciones en los próximos años.

El grueso de variables obtenidas está ilustrado con una serie de cuadros y gráficos comparativos en los que se recogen las cifras más relevantes. Entre ellos destaca el gran cuadro final con el ranking de las cien principales empresas adjudicatarias del Ministerio de Defensa según el valor total de sus contratos.

Del análisis de todo ello se descubre, por ejemplo, que algo está cambiando en la contratación de suministros, servicios y obras del Ministerio de Defensa. Si en el ejercicio 2015 el fin de ciclo de la contracción del gasto parecía llamar a la puerta tras casi una década de ajustes por el difícil contexto económico, 2016 ofrece los primeros datos con los que atisbar una tendencia hacia unas adjudicaciones más beneficiosas para las empresas en general. Por un lado por su cuantía global, que una vez descontado el efecto distorsionador de algunas adjudicaciones extraordinarias ofrecen un incremento continuado, pero sobre todo por la forma: al fin más abierta y transparente tras años en los que los acuerdos restringidos eran la norma.

El análisis de las adjudicaciones del Ministerio de Defensa durante el ejercicio 2016 a partir de la información publicada por el Boletín Oficial del Estado (BOE) ofrece las claves de unos cambios que benefician a cientos de licitadoras de multitud de sectores y, sobre todo, representa una guía para los aspirantes a esas adjudicaciones. Para ellos resulta clave conocer qué segmentos industriales consiguen ahora los contratos más importantes, qué empresas están logrando hacerse con el mayor número de ellos o qué modalidad de procedimiento es la más empleada por la Administración de Defensa en cada contexto. El resultado es una herramienta útil para aumentar la eficacia de las compañías en el nuevo ambiente de aparente reactivación económica.

El Mapa de Contratación del Ministerio de Defensa durante 2016 está ilustrado por una valiosa serie de gráficos y tablas en las que desde su primera edición este informe enumera las empresas que más contratos obtienen, las que se benefician de los acuerdos más cuantiosos, los sectores con la contratación más activa, las modalidades de concurso más empleadas y otros baremos de gran interés para las compañías, los asesores del sector, los funcionarios de contratación y, en general, todos los interesados en la evolución de los recursos de Defensa.

Este documento aporta una valiosa e inédita información sobre qué adquiere Defensa, a quién y cómo, y compara los resultados con las mismas variables de los ejercicios anteriores para trazar las tendencias en el destino del presupuesto militar español.