El anuncio de que el Pentágono ha autorizado la posible venta de aviones de combate F-35 a Bélgica, recogido este martes por Infodefensa.com, no ha dejado indiferente a Eurofighter, el otro contendiente con posibilidades en este milmillonario concurso. El socio británico del consorcio europeo, BAE Systems, que es el encargado de liderar las negociaciones, ha asegurado a Bruselas que si acaba eligiendo su avión le permitirá participar en el futuro desarrollo del aparato e incluso en otros nuevos que puedan llegar. Con ello el papel de Bélgica se acercaría al de los cuatro socios con los que ya cuenta el proyecto (Reino Unido, Alemania, Italia y España).
BAE Systems ha puesto negro sobre blanco esta promesa y se la ha facilitado a los medios. En el comunicado afirma que, en todo caso, esta propuesta industrial a largo plazo ya fue revelada la semana pasada en una jornada industrial sobre el caza Eurofighter Typhoon que tuvo lugar en Bruselas. Al acto asistió medio centenar de representantes de la industria y el mundo académico y se centró en las colaboraciones con el sector belga que derivarán si el Eurofigther es elegido en el programa de compra de 34 cazas, al que se estima un valor de 3.750 millones de euros.
En síntesis, lo que ofrece el consorcio Eurofighter, del que Airbus y Leonardo también forman parte, es la oportunidad de que la industria belga también tenga voz en el futuro desarrollo del avión; el acceso a “valiosos datos” de misión y de guerra electrónica, al trabajar junto con Reino Unido; la oportunidad de participar en la estructura de apoyo de los aviones, y la oportunidad de asegurar que el país quede “bien posicionado” en los futuros programas aeronáuticos europeos.
Además de estas ventajas, una importante baza de Eurofighter frente al F-35 que la nota de BAE Systems no señala es el precio. El valor estimado por Estados Unidos para dotar a Bélgica de 34 F-35 es de 6.530 millones de dólares (cerca de 5.300 millones de euros al cambio actual), de acuerdo con la información oficial de la DSCA (Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad del Pentágono). Esta cifra excede en más de 1.500 millones la que Bruselas tiene previsto gastar en la compra de los aviones.
El Gobierno belga acordó el pasado marzo el lanzamiento del programa de adquisición de 34 aviones de combate con los que sustituirá a su actual flota de 54 F-16. Los candidatos contemplados inicialmente para hacerse con el contrato fueron las compañías norteamericanas Lockheed Martin, que opta con su F-35A Lightning II, y Boeing, fabricante del F/A-18E/F Super Hornet; la francesa Dassault Aviation, que ofrece su Rafale; la sueca Saab, con el JAS-39E/F Gripen, y Eurofighter, desarrollado por el consorcio del mismo nombre y financiado por Reino Unido, Alemania, Italia y España.
Sin embargo, Boeing optó en la primera mitad del año pasado por retirarse del concurso por la falta de opciones para su caza Super Hornet, tras revisar detenidamente la solicitud belga para que participasen, y unos meses después Saab tomó el mismo camino aduciendo por su parte una falta de apoyo de la política exterior sueca para seguir adelante. De este modo, en teoría aún se mantienen con opciones, además de Lockheed Martin, Eurofighter y Dassault. Si bien esta última ha visto muy menguadas sus posibilidades tras las declaraciones realizadas por el ministro de Defensa belga, Steve Vandepunt, afirmando que la oferta francesa “es demasiado buena para ser verdad”.
Las autoridades galas han prometido, un retorno económico al país cliente (fórmula conocida como offset) de hasta 20.000 millones de euros, según algunas fuentes. De acuerdo con Vandepunt, Francia “está tomando una ruta diferente” a la marcada por el programa belga, para tratar de ganar opciones. Infodefensa.com publicó este mes que París ha llegado a enviar únicamente una carta de tres páginas en la que se menciona una colaboración junto con Alemania en torno a un nuevo avión de combate europeo, en vez de los voluminosos archivos que Estados Unidos y Reino Unido han enviado para optar con, respectivamente, sus F-35 y Eurofighter, los únicos que aún parecen contar con posibilidades en este concurso.