La participación de Reino Unido en la ofensiva aliada contra el llamado Estado Islámico (EI) ha llevado a las autoridades del país a alargar la operatividad de sus aviones de combate Tornado dos años más. La Real Fuerza Aérea (RAF) iba a retirarlos hace unos meses para reemplazarlos por cazas Eurofighter Typhoon, pero el ministro de Defensa, Michael Fallon, ha anunciado que seguirán en activo hasta marzo de 2017.
Fallon viajó el pasado martes a Bagdad y explicó ante los medios de su país que estos aviones “han demostrado su valía” en la lucha contra el EI en Irak, donde vienen participando en operaciones de bombardeo de sus posiciones desde septiembre de 2014. La utilidad de los Tornado “en la campaña aérea”, añadió el titular de Defensa británico, citado por Ria Novosti, es debida “a la precisión de su armamento y a las tareas de reconocimiento y vigilancia que acometen cuando no están bombardeando”.
“Los estadounidenses y otros aliados valoran particularmente la contribución de los Tornado y por eso vamos a continuar utilizando un escuadrón durante otro año más”, concluyó Fallon.
Las operaciones de Reino Unido contra el EI también se extienden a Siria, donde el Gobierno ha admitido que ha enviado a sus pilotos a misiones de bombardeo con las fuerzas aéreas de Estados Unidos y está previsto que inicie una campaña abierta de operaciones el próximo otoño. Para ello se deberá contar con el apoyo del parlamento británico, que ya rechazó una ofensiva contra el ejército del presidente Bashar al-Asad en 2013.
Los Panavia Tornado fueron desarrollados en los años setenta por Reino Unido, la entonces Alemania Occidental e Italia a través de un consorcio formado por British Aerospace, MBB y Alenia. Se crearon tres versiones: cazabombardero, avión de ataque a las defensas aéreas enemigas e interceptor. Los Tornado, de los que se han fabricado casi un millar de unidades para sus tres socios más Arabia Saudita, también han participado en combates en la Guerra del Golfo de 1991, en Bosnia, en Kosovo, en Irak, en la intervención militar en Libia en 2011, en Afganistán y en Yemen.
Fotos: Royal Air Force