El consorcio de misiles ruso Almaz-Antey ha denunciado a la Unión Europea por haber congelado sus bienes y haberle prohibido exportar productos militares multiuso como posible represalia tras el derribo el 17 de julio de un avión Boeing 777 de Malaysia Airlines sobre la región ucraniana de Donetsk, cuando volaba de Amsterdm a Kuala Lumpur. La empresa, explica textualmente en un comunicado, cree que existe un vínculo directo entre la implementación de las sanciones hechas por la UE contra el consorcio y la catástrofe acaecida al Boeing 777 de Malaysia Airlines.
Los responsables de Almaz-Antey afirman que el vuelo conocido como MH17 fue destruido por un misil 9M38 (M1) del sistema de defensa antiaérea BUK-M1 en la región de la localidad de Zaróschenskoie. La empresa explica a continuación que este modelo de misil dejó de fabricarse en 1999, y toda la producción restante se vendió a los clientes extranjeros. Dado que la empresa fue fundada en 2002, no pudo exportar a nadie misiles de este tipo, aclara el texto.
Por este motivo la compañía considera que las sanciones que le ha impuesto la UE carecen de todo fundamento y deben ser retiradas a la brevedad.
Además, prosigue la nota, los análisis también detectaron que el misil no pudo haber sido lanzado desde la localidad Snézhnoie, si no que en realidad sólo pudo haber sido lanzado desde la localidad Zaróschenskoie.
Le empresa revela que también ha realizado un análisis escrupuloso de los restos tanto de la aeronave como de los elementos destructivos presentados por la Comisión Internacional como extraídos de los distintas partes del fuselaje del avión. A partir de ese estudio confirma que sólo pudo tratarse de un misil 9M38 (M1) y que el cruce de la trayectoria del misil y el avión sólo fue posible desde una región circunscrita entre los 2,5 por 3,5 kilómetros, más al sur del poblado de Zaróschenskoie, y no desde el pueblo de Snézhnoie como se mantiene.
El informe detallado del análisis efectuado por los especialistas de la empresa ha sido entregado a la Comisión Internacional.
El consorcio subraya que es el creador de los sistemas de misiles antiaéreos y sistemas de misiles terrestres de longitud mediana BUK. Por ello, Almaz-Antey tiene la competencia exclusiva en la esfera de conocimiento, composición y funcionamiento de sus misiles. No obstante, las conclusiones finales sobre cómo y con qué fue destruido el avión, se podrán hacer únicamente después de todos los peritajes tecnológicos. La nota concluye añadiendo que hasta el momento el consorcio no posee toda la información sobre los peritajes efectuados por la Comisión Internacional.
Almaz-Antey fabrica sistemas antiaéreos de misiles terrestres y navales, estaciones de radar y sistemas móviles de comando.
Fotos: Almaz-Antey