El Ministerio de Defensa Alemán presentó la semana pasada un informe al Bundestag (parlamento federal) en el que se anuncia sus planes para el desarrollo del sucesor del carro de combate Leopard 2, cuya vida operativa acabará en 2030. El futuro contrato para este trabajo caerá con probabilidad en la empresa resultante de la fusión programada entre la empresa alemana Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y la francesa Nexter Systems, según auguran distintos medios de comunicación germanos.
La radio internacional pública alemana Deutsche Welle (DW), que llama al futuro desarrollo Leopard 3, se ha hecho eco de estas informaciones y explica que Alemania y Francia ya “están considerando cooperar en el desarrollo de un sucesor para el tanque Leopard 2”. De cuajar la unión de KMW y Nexter Systems, la resultante sería una compañía con una plantilla de 6.000 trabajadores y una facturación anual de aproximadamente 2.000 millones de euros con notables posibilidades de sacar adelante este programa.
El viceministro de Defensa Markus Grübel ha explicado al parlamento que desde ahora y hasta el año 2018 se realizarán “estudios conjuntos” sobre tecnologías y conceptos militares entre los que se incluye la construcción de un nuevo tanque de batalla. Los Leopard 2, de los que Alemania encargó dos millares de unidades en la década de 1980, entraron en servicio en 1979, en plena Guerra Fría. Actualmente sólo siguen operativos en el país algo más de dos centenares de estos tanques, aunque las actuales tensiones con Rusia derivadas del conflicto en Ucrania han llevado al país a anunciar la reactivación de un centenar de los Leopard 2 que permanecían retirados.
La cadena de televisión Ukraine Today, que ha recogido la información publicada por Deutsche Welle, añade que las autoridades alemanas han decidido comenzar a diseñar nuevos equipos militares en respuesta al nuevo tanque T-14 Armata que Rusia exhibió por primera vez hace un mes en las celebraciones del llamado Día de la Victoria en Moscú, en el que se conmemoró el fin hace setenta años de la Segunda Guerra Mundial.
La nueva arma rusa, que competirá en el mercado en torno a la mitad de precio que lo hacen desarrollos como el Abrams norteamericano o el propio Leopard 2, está previsto que sirva de plataforma para un futuro tanque robot, según diversas informaciones publicadas con motivo de su presentación en sociedad.
Fotos: KMW