El estado mexicano de Guerrero, el segundo del país en número de armas de fuego registradas, continúa con la adquisición de armamento pese a que el Índice de Paz en México 2015 lo sitúa en la última posición por sus altas tasas de violencia.
Esta situación se pone de manifiesto con la acusación la semana pasada, por parte de la Fiscalía de Stuttgart (Alemania), contra de seis empresarios quienes, entre 2006 y 2009, introdujeron en el país mexicano alrededor de 10.000 rifles de asalto tipo G-36 de la empresa armamentística Heckler & Koch. De momento, no se han dado a conocer los nombres de los implicados en el caso.
Los seis empresarios están acusados de incumplir la ley de control de armas de guerra, ya que este tipo de armamento no está incluido en las licencias de exportación y en la legislación que regula el comercio exterior. En los archivos del caso, además, se encuentran incluidos expedientes contra 13 empleados más. A esto hay que añadir que la investigación deja abierta la puerta a que varias de las armas fruto de esta polémica, como los fusiles de asalto italiano Beretta tipo SCP 70/90 y los fusiles AR-15 de la empresa estadounidense Colt, de moda durante la guerra de Vietnam (1955-1975), estén en manos de agentes de la propia Policía de Guerrero.
Esta acusación es la primera después de haberse celebrado, en agosto pasado, la primera reunión del Tratado Internacional sobre el Comercio de Armas en Cancún (México), donde las normas se orientaron a impedir la afluencia de armas a países donde se sabe se destinarán a cometer genocidio, crímenes de lesa humanidad o crímenes de guerra, como en el caso de México y en particular de su zona sur-sureste, donde se suman actualmente más de 120.000 armas de fuego, según cifras de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
De acuerdo con la dependencia militar, desde 2005 y al menos hasta este año 2015, Michoacán ocupa el primer lugar en número de armas con 53.245 en su poder seguida de Guerrero, en segundo puesto, con 30.689. Oaxaca es el tercero con 20.012 y el Estado de México es cuarto con 11.185. El quinto lugar lo ocupa el Distrito Federal con 6.031.
En el marco del tratado sobre el comercia de armas, el expresidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz, Óscar Arias, dijo que “cuando las armas circulan libremente y llegan a las peores manos posibles, la ley debe hablar, y cuando las vidas de inocentes corren peligro debido a la ausencia de regulación, la ley debe hablar”.
Fuente: Instituto para la Economía y la Paz