(Infodefensa.com) Peter Watson, Lima – En el marco del programa de transferencia de tecnologías y compensaciones industriales offset acordado entre los gobiernos de Perú y Corea del Sur a través del contrato de compra y ensamblaje de aviones de entrenamiento básico KT-1P, la Fuerza Aérea del Perú (FAP) recibirá asesoría técnica coreana para el desarrollo local de un drone de combate.
El Centro de Desarrollo de Proyectos de la FAP ha desarrollado cuatro aviones de pilotaje remoto (RPA, por sus siglas en inglés) de diversas capacidades. Desde un RPA de pequeño porte con un alcance de unos 25 kilómetros hasta modelos de mayor tamaño con un alcance de 400 kilómetros. Los sistemas desarrollados por CEDEP son básicamente medios de vigilancia, con capacidad para remitir imágenes diurnas y/o nocturnas (con cámara FLIR) al operador o estación de control en tierra.
La transferencia tecnológica ofrecida por Corea del Sur le permitirá a la FAP el desarrollo de drones con autonomía de vuelo aproximada de 24 horas (siendo ésta la gran cualidad de los RPA por sobre los aviones tripulados, su gran autonomía), capacidad para remitir imágenes térmicas y diurnas en tiempo real, capacidad para portar armamento y realizar misiones en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), desde la ciudad de Lima, con margen para permanecer en estación.
El director de informaciones de la FAP, mayor general Carlos Chávez Cateriano, confirmó a medios locales que, con capacidades similares a los competidores en su segmento, fueron precisamente las compensaciones industriales ofrecidas por Corea del Sur lo que inclinó la balanza a favor del entrenador KAI KT-1P, de los cuales, a las unidades 5 y 6 se le instalaron las alas hacia finales de julio 2014 en los talleres del Servicio de Mantenimiento (SEMAN) en la ciudad de Lima.
Foto: Peter Watson