2/7/2010 (Infodefensa.com) México DF - El Comando Norte de Estados Unidos entrena a miembros de las Fuerzas Armadas de México en programas de contrainsurgencia, similares a los que utiliza para desmantelar redes en Afganistán e Irak.
Según publica el diario El Universal, estas técnicas de entrenamiento se aplicarán para combatir a los cárteles del narcotráfico.
La mayoría de los soldados estadounidenses que participan en estos entrenamientos han encabezado operaciones en Afganistán e Irak, incluyendo trabajos sociales y reconstrucción. El entrenamiento se realiza con base a la experiencia de las fuerzas estadounidenses combatiendo a grupos contrainsurgentes con la premisa que "el enemigo vive entre civiles y no es externo al país".
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó a este respecto que las fuerzas armadas de México reciben entrenamiento por parte del Comando Norte y del ejército de Estados Unidos en su conjunto, pero no dio detalles sobre los programas en los que participan los militares nacionales.
"La prioridad número uno será nuestra asociación con México. No hay duda", afirmó James Winnefeld Jr., nuevo comandante del Comando Norte de los Estados Unidos, quien agregó que la relación entre las fuerzas armadas de ambos países nunca ha sido mejor.
Desde el Comando Norte han indicado que, "basados en la experiencia que han adquirido las fuerzas estadounidenses en Afganistán e Irak combatiendo contra insurgentes, éste comando trabaja con las fuerzas armadas de México entrenándolos con la idea de que el enemigo vive entre civiles y no es un enemigo externo al país".
Mediante entrenamientos y programas de intercambio con las fuerzas armadas de México, el Comando Norte se ha concentrado en proporcionar entrenamiento en áreas de inteligencia y en la forma en que deben trabajar de manera conjunta en operaciones con otras agencias.
Soberanía de México
Al destacar el respeto a la soberanía de México, Winnefeld señaló que existen grandes oportunidades para "compartir entrenamiento, información e inteligencia, y ayudar al ejército mexicano a construir capacidades".
"Nuestra relación -militar a militar- con México se está fortaleciendo, con total respeto a la soberanía mexicana y con responsabilidad compartida en el combate a la actividad del tráfico ilícito transnacional que afecta nuestras naciones", ha llegado a afirmar el comandante del Comando Norte Victor Renuart ante el Comité de Fuerzas Armadas del Senado estadounidense.
Renuart destacó que, como parte del acercamiento total del gobierno de Estados Unidos, la más significativa contribución del Comando Norte es el fortalecimiento de la capacidad operativa del Ejército Mexicano, la Fuerza Aérea y la Armada, "centrándose en la capacidad de desarrollar análisis y compartir información que permita al Ejército Mexicano conducir operaciones en contra de las organizaciones del narcotráfico para, sistemáticamente, desmantelarlas".
El Comando Norte ha informado por otra parte que el Ejército Mexicano envía también oficiales a Estados Unidos para observar operaciones o recibir entrenamiento en diversas áreas, entre ellas en derechos humanos y legislación, aspectos que, afirmó, "son necesarios para transformar a los militares, de una fuerza convencional diseñada para combatir amenazas externas, a un ejército que tiene que enfrentar una guerra irregular donde el enemigo vive entre civiles".
Formación en materia de Derechos Humanos
Por petición de Renuart el Instituto para la Cooperación de la Seguridad Hemisférica (WHINSEC, por sus siglas en inglés) proporcionará, en los próximos meses, entrenamiento a las fuerzas armadas de México en materia de derechos humanos, estableciéndose que no se revelarán los nombres de los estudiantes ante el riesgo de que puedan ser objetivos de organizaciones del narcotráfico o de grupos terroristas.
Renuart destacó que "si bien se trabaja con México en desarrollar y fortalecer la capacidad militar para combatir al narcotráfico, el objetivo de largo plazo es establecer una relación duradera para cooperar en futuros aspectos de seguridad mutua".
Por su parte, Winnefeld afirmó que existen grandes oportunidades para favorecer la relaciones entre militares de Estados Unidos y México, y siempre en términos aceptables para ambos países, especialmente con respeto a la soberanía mexicana.