El teniente general Fernando José López del Pozo lidera desde mayo de este año el Mando de Operaciones (MOPS). Este órgano, subordinado al Jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), es responsable del planeamiento y la dirección en la actualidad de 17 operaciones repartidas por cuatro continentes, en las que permanecen desplegados casi 3.000 militares españoles de los tres Ejércitos y la Guardia Civil.
En los últimos meses el general ha visitado la mayoría de los destacamentos españoles desde Colombia, hasta República Centroafricana, pasando por Irak o Letonia. Tras este primer periplo por las misiones internacionales, López del Pozo charla con Infodefensa.com sobre los próximos retos del mando y analiza algunas cuestiones que están sobre la mesa como la necesidad de un aumento del presupuesto y los nuevos programas europeos de defensa.
España ha planteado un aumento paulatino del presupuesto, ¿en qué áreas del MOPS son necesarias una mayor inversión?
No se trata de una mayor inversión en unas áreas u otras, desde el MOPS cada misión, cada militar y cada sociedad a la que ofrecemos seguridad es igual de importante. Los ejércitos y la Armada son los que precisan recuperar capacidades perdidas. El objetivo es modernizar ciertas áreas y, por supuesto, mantener adecuadamente lo que ya poseen. Tras varios años de presupuestos que han llevado a una lenta, pero cierta, disminución de capacidades, tiene que cambiar la tendencia. El Mando de Operaciones opera con las capacidades que ponen a su disposición los Ejércitos y la Armada, cuanto más y mejores capacidades posean, más fácil resulta nuestro cometido.
¿Qué supone el despliegue de cerca de 3.000 militares en operaciones?
En septiembre teníamos exactamente desplegados 2.932 efectivos en 17 operaciones en el exterior. Hay fuerzas del Ejército de Tierra en diez operaciones en los cuatro continentes, cuatro destacamentos aéreos en dos continentes y fuerzas navales operando en el Mediterráneo y en el Índico y en ocasiones en el Golfo de Guinea. Las misiones en el exterior son uno de los principales elementos a través de los cuales la sociedad española conoce a las Fuerzas Armadas y además condiciona el adiestramiento y equipamiento de las FAS. Mantener a casi 3.000 militares supone un esfuerzo personal y material tanto para el Mando de Operaciones, como para las unidades y las familias. Pero dicho esfuerzo contribuye a ofrecer una mayor seguridad y defensa de España.
¿Está previsto un aumento del número de militares desplegados?
No está previsto aumentar el número de personal, pero si intentamos incrementar en calidad, presencia y visibilidad. Malí es un ejemplo de esta política que consiste en aumentar el número de mandos, sobre todo generales y coroneles, que tenemos en las misiones. En el caso de Mali el próximo año un general español tomará el mando de la misión EUTM de la Unión Europea, relevando a Bélgica como país líder. Además en la República Centroafricana contamos con un general español al mando, perteneciente al Eurocuerpo. Por último, en el Líbano, además de mantener el liderazgo en el sector este, un coronel español actúa como adjunto de operaciones al jefe de Estado Mayor del Cuartel General de la misión. Y además queremos que el futuro jefe de la misión -un general de división- sea español por lo que vamos a presentar un candidato. Cabe destacar que España finalizó en agosto de este año el mando de la fuerza de la Operación Atalanta y ahora lidera fuerza de la Operación Sophia, siendo el BAC Cantabria el buque de mando.
¿Qué objetivos se marca en esta nueva etapa al frente del MOPS?
El principal objetivo es alcanzar la capacidad operativa plena del Mando de Operaciones. Para ello, durante el primer semestre de 2018 se llevará a cabo el ejercicio de certificación Mopex 18, con el que se evaluará nuestra capacidad para planear y conducir operaciones a un nivel operaciones en un escenario de media-alta intensidad. Otro de los retos a medio plazo es revisar y validar los distintos planes para las operaciones actuales y futuras, además de los planes de contingencia el Estado Mayor. Las Fuerzas Armadas seguirán comprometidas con las actuales operaciones y estarán preparadas para incrementar el esfuerzo o modificarlo conveniente y oportunamente, en función de lo que nuestro Gobierno decida. En todo caso, se espera mantener el nivel actual de esfuerzo.
¿Qué le parecen iniciativas como el Plan de Acción Europeo de la Defensa (Edap)?
La rama militar de Europa ha descansado durante mucho tiempo en la OTAN, una cuestión que está bien. Europa y la OTAN tienen que ser complementarias y tener ciertas sinergias, pero hay algunas capacidades en las que Europa no puede depender de Estados Unidos. El caso más típico es el transporte estratégico, los grandes aviones son estadounidenses. Ahora con la entrada en servicio del A400M esta situación ha cambiado, estamos en la buena dirección.