La Dirección General de Armamento y Material (DGAM), el órgano especializado en adquisiciones del ministerio de Defensa español, ha solicitado a tres empresas ofertas para los programas tecnológicos relacionados con el nuevo vehículo blindado VBR 8x8 para las Fuerzas Armadas, informaron a Infodefensa.com fuentes solventes.
Las fuentes señalaron que las tres compañías que han recibido la documentación y los pliegos técnicos son Santa Bárbara Sistemas, Indra y SAPA, con el objeto de que respondan antes del 20 de septiembre con las ofertas que permitan una adjudicación.
Los programas tecnológicos tienen un periodo de ejecución de hasta 2017 y contemplan la entrega de varios demostradores. A partir de esa fecha, España se plantearía un contrato de adquisición para el suministro de al menos 400 unidades que permitan la sustitución de los viejos BMR 6x6 y de parte de los M-113 de cadenas.
La semana pasada, citando fuentes oficiales anónimas, el diario estadounidense Defense News informó de que se esperaba que los proyectos tecnológicos, técnicamente presupuestados en el Ministerio de Industria al tratarse de fondos relacionados con I+D, fueran decididos “a finales de agosto o septiembre”.
El 31 de julio, el Consejo de Ministros aprobó la autorización a Defensa e Industria para firmar los contratos relacionados con los programas tecnológicos asociados al futuro VCR 8x8 por un importe total de 89,2 millones de euros.
Según Defense News, Santa Bárbara Sistemas, principal empresa española de diseño y fabricación de vehículos blindados de ruedas y cadenas, estaba posicionada como favorita para el desarrollo del VBR 8x8 español tomando como partida el vehículo Piraña 5, diseñado por la compañía suiza Mowag, integrada como la misma SBS en el grupo europeo de sistemas terrestres de General Dynamics (GDELS).
Además de las empresas cabeceras del proyecto, los responsables del Ministerio de Defensa han indicado en privado que debe propiciarse que en los proyectos participen otras empresas nacionales más pequeñas en tamaño pero que puedan contribuir con equipos y subsistemas innovadores y relevantes en sus áreas de especialización, como podría ser el caso de la compañía Tecnobit en el campo de la optrónica.
La integración de estos subcontratistas al futuro vehículo VCR 8x8, consideran los mismas fuentes, contribuirá a aumentar los componentes nacionales del nuevo vehículo y, al mismo tiempo, asegurar capacidades tanto de producción como de ingeniería, ambas estratégicas para el sector de la defensa español.
Plataformas y torres
En junio pasado, el Ministerio de Defensa español recibió la respuesta de las cinco empresas a las que invitó a remitir información sobre el VCR 8x8: la mencionada Santa Bárbara Sistemas, de la estadounidense General Dynamics, la filial española de la italiana CIO Iveco-Oto Melara, la francesa Nexter, la finlandesa Patria y el consorcio alemán Artec, formado por KMW y Rheinmetall.
El diario norteamericano recuerda, en este sentido, que el ministro de Defensa español, Pedro Morenés, declaró recientemente en el Parlamento que “todos los vehículos blindados 8x8 deberían ser construidos en factorías españolas”. Solo dos de las cinco empresas invitadas a contestar a la RFI cuentan con instalaciones en suelo español, Santa Bárbara Sistemas e Iveco-Oto Melara.
Según fuentes de la industria no identificadas consultadas también por Defense News, el Gobierno español optaría por una “decisión salomónica” que pasaría porque SBS fabrique las plataformas e Iveco-Oto Melara se encargue de las torretas.
El Piraña 5, con un precio estimado de entre 3,8 y 5,5 millones de euros de acuerdo con los datos facilitados en el proceso de información, según este diario, está diseñado con el máximo nivel de protección contra minas e IEDs, uno de los requisitos esenciales del Ejército español después de 13 años de experiencia en Afganistán, y un peso total de 30 toneladas, lo que permite una carga de hasta 17 toneladas.
En noviembre pasado, la presidenta mundial de General Dynamics, Phebe Novakovic, visitó Madrid y durante su estancia en la capital española mantuvo una audiencia con el rey Felipe VI y reuniones con representantes del Ministerio de Defensa.