(Infodedefensa.com) Berlín – El gobierno alemán ha revocado la autorización a un negocio millonario de venta de material militar de la empresa germana Rheinmetall a Rusia. Con esta medida el Gobierno germano va más allá de las sanciones acordadas por la Unión Europea (UE) contra Rusia como castigo por su papel en la crisis de Ucrania.
La medida fue anunciada ayer el Ministerio de Economía de Alemania, según recoge el portal del servicio de radio internacional alemán Deutsche Welle. Textualmente, el portavoz de este ministerio respondió a una información aparecida en el diario alemán Süddeutsche Zeitung que se ha “revocado un permiso concedido por el anterior gobierno de coalición –entre la Unión Cristianodemócrata (CDU) y el Partido Liberal (FDP)– para construir un centro de ejercicios de combate”.
Rheinmetall iba a realizar esta obra durante este ejercicio en la ciudad de Mulino, en el este de Moscú. En estos centros de ejercicios se pueden formar hasta 30.000 soldados al año gracias a instrumentos de simulación altamente desarrollados. El negocio estaba valorado en cerca de 100 millones de euros, recuerda el portal alemán.
Abierta la puerta a una reclamación por daños y perjuicios
Por su parte, el diario apunta que el Ejecutivo germano trató de acordar con Rheinmetall la suspensión del contrato, sin embargo las negociaciones resultaron infructuosas, por lo que, tras la revocación ahora de la licencia, la empresa alemana tiene derecho a emprender medidas legales y a reclamar una indemnización por daños y perjuicios.
Revocando la licencia de exportación de Rheinmetall, Alemania va más allá de las sanciones acordadas la semana pasada por la UE y entre las que, entre otras, figura una moratoria de los negocios armamentísticos que no exceptúa los negocios acordados previamente.
En la víspera de anunciarse esta decisión, el ministro de Economía alemán, Sigmar Gabriel abogó, durante una entrevista concedida a un medio local, por implementar las sanciones económicas contra Rusia independientemente de los efectos negativos que puedan surtir en las exportaciones alemanes y, por extensión, a la economía del país. “No debemos actuar como una comunidad de intereses económicos sino como una unión política y debemos preocuparnos por la paz en el continente”, explicó.