(Infodefensa.com) Madrid La Agencia de Cooperación de Seguridad y Defensa (DSCA) estadounidense ha notificado al Congreso la posible venta a Francia de 16 drones MQ-9 Reaper RPA (aeronave pilotada por control remoto). La transacción conlleva un coste aproximado de 1.500 millones de dólares (más de 1.150 millones de euros).
La DSCA informó el jueves al Congreso norteamericano de esta operación que incluye distintas partes y equipamiento asociados a las aeronaves, la formación del personal que se va a ocupar de ellas y servicios de apoyo logístico.
Según la información facilitada por esta agencia oficial la petición del Gobierno de Francia para una posible venta comprende 16 MQ-9 Reaper RPA, 8 estaciones de control terrestre móviles (GCS), 48 motores turbohélice Honeywell TPE331-10T (16 instalados y 32 de recambio), 24 subestaciones terminales satélite terrestres, 40 sistemas de comunicaciones Ku Bnd Link-Airborne, 40 sistemas Lynx de radar de apertura sintética con indicador de objetivos terrestres en movimiento (SAR/GMTI) de General Atomics, 40 sistemas AN/DAS-1 de determinación de objetivo multiespectral (MTS)-B, 40 terminales de datos terrestres, 40 sistemas de radio ARC-210, 40 sistemas integrados de posicionamiento global/navegación inercial, y 48 sistemas de identificación amigo o enemigo (IFF) AN/APX-119 y KIV-119.
Además se incluye el suministro de distintas partes y repuestos; comunicaciones; ensayos, apoyo técnico; publicaciones y documentación sobre aspectos técnicos, de aeronavegabilidad y mantenimiento; asistencia; estudios de campo; capacitación del personal; equipos de entrenamiento y pruebas de vuelo, entre otros.
La DSCA recuerda que Francia es uno de las mayores potencias económicas y políticas de Europa y la OTAN, además de un aliado de Estados Unidos en la búsqueda de la paz y la estabilidad. De esta forma, se añade en su nota, resulta vital para el interés nacional de Estados Unidos atender a Francia para desarrollar y mantener una capacidad de autodefensa fuerte y preparada.
Esta venta potencial mejorará las capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) de las fuerzas armadas francesas en apoyo de operaciones nacionales, de la OTAN, bajo mandato de Naciones Unidas y otras misiones en coalición.
Con esta transacción Francia mejorará la capacidad de sus tropas, que dispondrán de un mejor conocimiento de la situación de batalla, anticipando las intenciones del enemigo, contará con un mayor apoyo a las tropas en tierra, y mejorará las operaciones de búsqueda y rescate en combate.
Unas características comunes de ISR aumentarán en gran medida la interoperabilidad entre las fuerzas armadas francesas y estadounidenses.
El contratista principal de esta operación es General Atomics Aeronautical Systems (GA-ASI), cuya sede principal se encuentra en la localidad californiana de San Diego, en Estados Unidos.
La nota emitida por la Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad anunciando esta venta potencial, es un trámite requerido por la ley que no implica que la operación de venta ya esté concluida.
Puntos contradictorios con lo anunciado por Francia
Defense Aeropace destaca que la notificación de este organismo contradice algunas de las declaraciones que el propio ministro de Defensa francés Jean Yves Le Drian ha emitido sobre este asunto.
Por ejemplo, no se hace ninguna referencia a las dos aeronaves de segunda mano ya comprometidas y que debían entregarse a finales de este año; se menciona la venta de 16 aparatos, a pesar de que Le Drian había señalado un máximos de 12, además de los dos de segunda mano, y no hace referencia a la equipación de ningún sistema específico francés para adaptarlos a los requisitos de aeronavegabilidad del país, a pesar de que el ministro lo había mencionado. Al contrario, la notificación estadounidense especifica una lista completa de equipos norteamericanos que implicarían que están preparados para operar en Estados Unidos y no en Francia.
El documento tampoco indica qué versión del Reaper será suministrada a Francia. Lo que sí recoge es que representantes de los contratistas norteamericanos viajarán a Francia previamente. Los aparatos deberán de cumplir con las normas del tráfico aéreo europeo, lo que no es el caso de los Reaper convencionales.
Francia opera actualmente dos UAS Harfang preparados para misiones a media altitud y largas distancias (MALE). Pero, como explicó el propio titular de Defensa en un artículo publicado hace un mes por el diario parisino Les Echos ya fueron descritos como una solución provisional cuando fueron encargados en 2003, y no ha habido ningún progreso en una década.
El MQ-9 Reaper es el nombre que recibe este sistema aéreo no tripulado de vigilancia y combate de GA-ASI en el servicio con la Fuerza Aérea de Estados Unidos y la Real Fuerza Aérea Británica. Además opera en la Fuerza Aérea Italiana, donde se le conoce como MQ-9, en la NASA, bajo la denominación Ikhana, y con el Departamento de Seguridad Nacional de EE UU, donde se le denomina Predator B/Guardian.
La compañía GA-ASI, filial de General Atomics, está especializada en la fabricación de aviones dirigidos por control remoto (RPA, por sus siglas en inglés), radares tácticos de reconocimiento y sistemas de vigilancia electroópticos. Es la fabricante, entre otros, de los sistemas aéreos no tripulados (UAS) Predator, Gray Eagle y Avenger.
Foto: GA-ASI